FENERBAHçE 73

ANADOLU EFES 92

Si la frase rezaba tal que «no envié a mis barcos a luchar contra los elementos», quizá Zeljko Obradovic pueda aducir que no los envió a luchar contra Larkin y Micic, cuyos 55 puntos combinados reventaron los pronósticos en la semifinal entre equipos constantinopolitanos, llevando a su Efes a su primera finalísima de la Euroliga.

Un pluscuamperfecto Shane Larkin, autor de 30 puntos, 7 rebotes, 7 asistencias y una valoración de 43, fue la supernova de la semifinal, al punto. que los 25 puntos y 27 de valoración de Micic parecieron poca cosa, por no habar de los 10 tantos tan bien elegidos que ha convertido Anderson, o la aportación de los Motum, Dunston, Moerman o Balbay.

Más allá de la maravilla creada por las dos estrellas de Efes, hay que centrar la diferencia en triples –6 de 21 por parte de Fenerbahçe, 1 de 7 en la segunda mitad; 14 de 32 de Efes, 6 de 13 en la segunda mitad–, y en los rebotes, con 25 a 43 para Efes, con Dunston imponiéndose a un tocado Vesely.

Silencio en la grada

De los 13.470 aficionados que vieron el partido en el pabellón, una inmensísima mayoría animaba a Fenerbahçe. Como lograra durante un rato en la semifinal de la Final Four de Berlín 2016, el partidazo de Larkin y Micic logró que esa grada tan gritona se callara.

Los de Ataman tomaron la delantera en el segundo cuarto, llegando 40-45 al receso, y ya no lo soltaron nunca. es posible que Obradovic y los suyos echaran de menos a Lauvergne y sobre todo a Datome, y es posible que Kalinic y Vesely, pese a firmar buenos números, no estuvieran a tope, pero lo cierto es que conforme pasaban los minutos, los de Ergin Ataman fueron ganando en confianza. Un parcial de 0-8 en el tramo final del tercer cuarto dio la primera gran ventaja a Efes, 55-68, y aunque Fenerbahçe quiso reaccionar de la mano de Green, Vesely y Kalinic, no le alcanzaron las fuerzas, y se quedó en evidencia ante un Anadolu Efes que no dejó de apretar el acelerador hasta el final. De hecho, sorprendió que Ataman diera tantos minutos a Larkin y Micic y que con 61-82 en el luminoso, llegase incluso a ensayar una presión a toda la cancha.

«Esta sensación es increíble, tío», reconoció el propio Larkin en sala de prensa. «Ha sido una temporada muy larga y hemos hecho un gran trabajo hasta llegar aquí. Ojalá sigamos haciendo historia y podamos levantar el trofeo por primera vez para el equipo», acabó.