GARA
IRUÑEA

Esparza rechaza dar vía libre a Chivite

A una semana de las urnas en Nafarroa, los medios próximos están dando tanta proyección a Navarra Suma que en su mitin central, anoche en Iruñea, su candidato Javier Esparza endureció el discurso contra María Chivite, del PSN, el socio que necesitará ineludiblemente para tener opciones de mayoría.

Es evidente que las opciones de doblegar al Cambio pasan por esta entente (y quizás requiera incluso sumar a Vox), y en este esquema Chivite ha dicho que no votará a Esparza. El cabeza de lista le devolvió la pelota afirmando que son ellos los descartan dar vía libre al PSN hacia la Presidencia si sumaran los ansiados 26 escaños y se les exigiera tal componenda.

«No vamos a aceptar el chantaje de ninguna fuerza ni de nadie», aseguró Esparza, que añadió tajantemente: «No vamos a abstenernos para que el PSN presida el Gobierno, no vamos a votar a favor de una presidenta socialista ni vamos a ceder la presidencia del Gobierno a María Chivite».

Esparza, quien afirmó que estas elecciones «van de nacionalismo o de constitucionalismo, de ruptura o de unidad de España», consideró que el PSN hasta ahora siempre «estaba del lado de los partidos constitucionalistas, pero ahora dicen que quieren gobernar con el nacionalismo vasco»&flexSpace;y le advirtió de que eso «nunca es gratis».

«Los navarros no quieren más nacionalismo, no quieren más populismo, y precisamente por eso el cuatripartito no va a tener los votos suficientes para gobernar y su tabla de salvación se llama PSN», auguró.

Por su parte, el candidato a la Alcaldía de Iruñea, Enrique Maya, se mostró esperanzado en «terminar con esta pesadilla de cuatripartito» y declaró que «vamos a decir adiós al sectarismo, a las imposiciones, a las obsesiones nacionalistas que han tenido maniatada a Pamplona durante cuatro años».

«Les queda una semana»

«El 26 de mayo se acaba el experimento fallido de Asiron y su cuatripartito», deseo Maya, que censuró al actual equipo de gobierno que «nos han querido hacer creer que Pamplona es una ciudad de pivotes y de petachos [en alusión a la peatonalización de Alde Zaharra], han querido que nos conformemos con lo cutre». «Les queda una semana», zanjó el que ya fuera alcalde de Iruñea entre 2011 y 2015, desbancado precisamente entonces por Asiron.

El cabeza de lista al Ayuntamiento de Iruñea subrayó que este próximo domingo en la capital navarra «no hay más que dos opciones: O Bildu o Navarra Suma». Hizo hincapié en que cada uno conlleva «dos modelos de sociedad completamente diferentes», el suyo de «futuro»&flexSpace;y el otro, caracterizado por el «sectarismo».