Imanol INTZIARTE
DONOSTIA
Elkarrizketa
ERNESTO GASCO
CANDIDATO DEL PSE A LA ALCALDÍA DE DONOSTIA

«Nos gustaría que se pudiera configurar un gobierno de mayoría progresista»

Ernesto Gasco entró en el Ayuntamiento de Donostia en 1995, y salvo un lapso de tiempo en el que fue viceconsejero en el Ejecutivo autonómico, ha sido un fijo en el pleno municipal. Estas serán sus segundas elecciones como cabeza de lista del PSE.

Es vox populi que la legislatura conjunta entre PNV y PSE no ha sido un paseo de vino y rosas. Ante una nueva cita con las urnas, Ernesto Gasco marca distancias y abre el abanico de opciones, por lo que pueda pasar.

¿Cuál es su diagnóstico sobre el estado actual de Donostia?

La ciudad está tranquila, que no es poco. Ha sido una ciudad muy convulsa, con muchas dificultades en la convivencia.

¿Cómo ha sido la relación con el PNV?

Era una apuesta por la ciudad, más que un interés entre partidos. Creíamos que era necesario un gobierno estable, de amplia mayoría, que resolviera algunas cuestiones que estaban pendientes. Nos gustaría que se pudiera configurar un gobierno de mayoría progresista. Hay una mayoría social progresista y creo que es el momento de que pueda superar sus diferencias.

Pero a la hora de la verdad ustedes acuerdan con el PNV...

Es una buena pregunta para EH Bildu, porque creo que está priorizando el frente soberanista al acuerdo entre progresistas.

Han acusado por ejemplo a Markel Olano de estar en ese frente soberanista, y eso no les ha impedido gobernar juntos.

Yo no he pactado nada con Markel Olano. Lo que digo es que en EH Bildu, como le pasa a ERC, deberían decidir si quieren apostar por gobiernos progresistas y de izquierdas, o prefieren avanzar por gobiernos soberanistas.

La vivienda aparece en las encuentas como la principal preocupación ciudadana…

Es verdad que hay dificultades. En esta legislatura se han hecho 2.500 viviendas, de las cuales 600 son de VPO. Pero no ha sido suficiente. Sigue habiendo entre 7.000 y 8.000 solicitudes. Hemos hecho un plan que habla sobre todo de la ciudad construida. No ir a edificar a colinas o terrenos verdes, que son pulmones, sino a espacios degradados que se puedan regenerar. Y hay que buscar un acuerdo con el Ministerio de Defensa. Es cierto que esos terrenos del cuartel de Loiola no han sido nunca de la ciudad. Pero entendemos que las necesidades del Ministerio de Defensa se pueden resolver en otros espacios.

Se habla de los barrios, pero luego sus propuestas estrella son en el frente marítimo…

Voy a hacer números. Polideportivo de Altza, 15 millones. Boulevard de Loiola, 8,8 millones. Boulevard de Añorga, 3,5 millones. Eliminar el viaducto de Iztueta, 10 millones. Si sumamos, vemos que la preocupación también está en los barrios.

Pero cualquier cosa que hagamos en el frente marítimo tiene una repercusión mucho mayor. De las dos propuestas de los socialistas en el litoral –soterramiento de la carretera en La Concha y pasarela de Mompas–, ninguna la tendría que pagar el Ayuntamiento. La pasarela la pagaría el Gobierno de España, y el soterramiento se pagaría con la tasa turística.

Esta legislatura ustedes han hecho una clara apuesta por incrementar el número de visitantes…

Hemos hecho una apuesta por la estabilidad, no por el crecimiento. En 2015-2016 tocaba hacer un diagnóstico, y decidimos un nuevo plan en el que no fuera el objetivo crecer, sino que apostara por la calidad.

Estamos teniendo crecimientos muy altos en lo que antes se llamaba temporada baja, de octubre a marzo, que estábamos muy flojos. Ahí ha habido crecimientos de dos dígitos todos los años, es donde hemos puesto los recursos.

Hay calles que dan pena, con tanto local vacío…

Tenemos que mejorar las peatonalizaciones. Y creemos que no debe de haber más centros comerciales en la ciudad. Pero tampoco en las poblaciones limítrofes. Tiene que haber un pacto metropolitano. Tenemos que estar preocupados con el precio de los alquileres. Los propietarios de esos locales piden unas rentas imposibles.

¿Destacaría algo que ha faltado por hacer en estos cuatro años?

Hay algo en lo que no hemos acertado esta legislatura; hay serias dificultades de aparcamiento para las personas que viven en los barrios. Tienen que dar vueltas, se genera tráfico, contaminación… y la opción es comprar un garaje privado a unos precios desorbitados.