GARA
GINEBRA

Las muertes de migrantes en América crecen un 57,6% en lo que va de año

Al menos 380 migrantes latinoamericanos han muerto en la primera mitad de 2019, un 50% más que en el mismo periodo del año anterior, según informó ayer la Organización Internacional para las Migraciones (OIM).

La cifra de víctimas mortales ha pasado de 241 entre enero y junio de 2018 a las 380 actuales.

Al menos 210 han perdido la vida en México, 66 de ellas en la frontera sur, 143 en el Caribe y 27 en Sudamérica. Además, aún se investigan las muertes de 42 migrantes en México y de decenas en el paso de Darién, una jungla situada entre Colombia y Panamá.

Se trata de la cifra más alta desde que la OIM recopila estos datos a través de la iniciativa Proyecto Inmigrantes Desaparecidos, hace cuatro años.

«Este mes ha estado marcado por numerosas tragedias en la frontera de Estados Unidos y México, donde al menos 23 personas han muerto desde el 30 de mayo, más de una por día», reconoció el portavoz de la OIM, Joel Millman, en una rueda de prensa desde la sede de la ONU en Ginebra.

Millman destacó que se trata de «un nivel de fatalidad que no habíamos visto antes», advirtiendo de que con la llegada del verano y el «intenso calor» se puede esperar que la situación para los inmigrantes y refugiados en tránsito «empeore».

Una de las víctimas fue una niña indígena de seis años que murió deshidratada en el estado de Arizona después de cruzar la frontera con México. Además, otra menor de doce años proveniente de El Salvador falleció de un disparo en el estado mexicano de Veracruz.

Baloch incidió en que «es absolutamente vital que la gente sea capaz de tener un acceso seguro al territorio».