El lunes comenzará en el Congreso de los Diputados el pleno de investidura de Pedro Sánchez, cuya primera votación tendrá lugar el martes y, como previsiblemente no obtendrá mayoría absoluta, deberá volver a una segunda votación el jueves, cuando necesita tener más apoyos que rechazos. A la vista de cómo se están desarrollando los acontecimientos, cada voto puede ser decisivo.

La diputada de EH Bildu Mertxe Aizpurua compareció ayer ante los medios para señalar que su grupo no será obstáculo para que Pedro Sánchez sea investido como presidente de Gobierno, aunque tienen razones para votar en contra del secretario general del PSOE. La posición del independentismo vasco está acordada con ERC. De hecho, ambas formaciones convocaron sus ruedas de prensa al mismo tiempo en Donostia y Barcelona.

Aizpurua arrancó su intervención destacando que, hasta el momento, «Pedro Sánchez ha dejado claro que no quiere nuestro apoyo ni activo ni pasivo». En seguida anunció que «el activo no lo tendrá», explicando además que «hay sobradas razones para votar no el martes».

Pero EH Bildu entiende que «Pedro Sánchez tiene que hacer frente a su responsabilidad, dar una solución democrática al derecho de nuestros pueblos, Catalunya y Euskal Herria, a decidir libre y democráticamente nuestro futuro». Aizpurua ha insistido en que «no puede darle la espalda» a esta realidad.

Según la diputada independentista, hay indicios suficientes de que Sánchez querría ser investido con la abstención de la derecha, con lo que «aumenta nuestra desconfianza», puesto que prefiere «no enfrentarse a los problemas estructurales del régimen del 78».

Que asuma su responsabilidad

Sin embargo, EH Bildu sostiene que «Sánchez tendrá que decidir entre aplicar el 155 o respetar la voluntad democrática de nuestros pueblos. Tendrá que decidir entre dar satisfacción a la oligarquía o a los intereses populares. Entre apostar por la represión o la convivencia democrática».

Por ello, EH Bildu aseguró que, aunque tienen motivos para rechazarlo, «no le queremos permitir que eluda su responsabilidad» así que con la fórmula que se presente a la investidura y sea cual sea el resultado de las negociaciones entre el PSOE y Unidas Podemos, «no seremos obstáculo para que Pedro Sánchez sea investido».

Pese a las múltiples preguntas que se le hicieron sobre si eso suponía que EH Bildu se abstendrá, Mertxe Aizpurua no lo aclaró, aludiendo a que todavía y hasta el martes la situación está muy abierta, aunque todo indica que junto a ERC optarán por la abstención.

ERC y JxCat

ERC anunció, por su parte, también sin concretar la fórmula, que no obstaculizará la investidura si hay un acuerdo entre PSOE y Unidas Podemos. En caso de que no se dé ese acuerdo, el número uno en el Congreso, Gabriel Rufián, y la portavoz del partido, Marta Vilalta, no aclararon qué es lo que harán.

Por su parte, la diputada de JxCat Laura Borràs aseguró ayer que su partido decidirá el sentido de su voto en el pleno de investidura de Pedro Sánchez tras escuchar la propuesta del presidente, pero «ahora mismo no se dan las condiciones», para una posición favorable.

Preguntada por la unidad de voto de JxCat con ERC, Borràs defendió que su partido apuesta por la unidad de acción con los republicanos y con EH Bildu, compañeros en el Grupo Mixto, asegurando que las conversaciones para coordinar el sentido de su voto «siguen abiertas».