M.I.
LOS GOONIES

Un clásico del cine ochentero de aventuras

Aunque la distribuidora se ha sacado algún aniversario de la manga, lo cierto es que “Los Goonies” (1985) es una película de culto que no necesita de ninguna excusa para volver a las salas de estreno con todos los honores. Steven Spielberg con su compañía Amblin consiguió la perfecta definición del cine de aventuras adolescente, y tuvo en el resultado final una mayor implicación que la habitual en un productor, ya que se encargó personalmente del montaje. Eso sí, la dirección se la confío a Richard Donner, uno de los maestros surgidos de la generación de la televisión que en los años 60 se pasó a la pantalla grande. Todo es mítico en esta película, en especial su irrepetible reparto, con un Josh Brolin que ya apuntaba sus maneras de tipo duro de jovencito. Y qué decir del personaje monstruoso de Sloth, debajo del cual se ocultaba el actor John Matuszak, y del que el grupo The Ramones hizo su mascota para los conciertos. Y de fondo por supuesto estaba el gran legado literario de Robert Louis Stevenson y “La isla del tesoro”, trasladado a los tiempos de la especulación capitalista con la construcción de un campo de golf como provocación para la rebeldía generacional.