GARA
BILBO

Marcha en bicicleta en defensa de unas condiciones dignas de trabajo en el servicio municipal BilbaoBizi

Trabajadores y trabajadoras del servicio del Ayuntamiento BilbaoBizi llevaron a cabo ayer por la tarde una marcha en bicicleta, partiendo desde el propio Consistorio para pedir «condiciones de trabajo dignas ante la situación de precariedad» a la que tienen que hacer frente.

Participaron en la movilización personas usuarias del servicio de préstamo de bicicletas, por un BilbaoBizi de calidad y en defensa de las condiciones laborales de la plantilla.

Las trabajadoras y trabajadores comenzaron a protestar el pasado junio. Tal y como recordó LAB, para poner en marcha el servicio de bicicletas eléctricas el Ayuntamiento de Bilbo recurrió, como en muchos otros casos, a la subcontratación, en este caso a la empresa NextBike. Según los trabajadores, la empresa enseguida se vio «superada por la gran acogida del servicio». De hecho, a finales del 2018 hubo una gran cantidad de protestas de usuarios por la ausencia y el mal estado de las bicicletas.

No llegan a mil euros

Los trabajadores están «hasta arriba de trabajo»: «No se les aplica el Convenio Colectivo que les corresponde, su sueldo no llega a mil míseros euros al mes, la plantilla es demasiado reducida para hacer frente a la carga de trabajo existente, deben realizar el mantenimiento y la entrega de las bicicletas a toda velocidad para asegurar en la calle la cantidad acordada con el Ayuntamiento, la empresa recurre a ETTs para hacer contrataciones puntuales y como la mayoría no están contratados a jornada completa realizan un montón de horas extra». En este sentido, informaron de que «el ritmo de trabajo» ya se ha saldado con un accidente laboral.

Los trabajadores destacaron que esto «no puede seguir así», y afirmaron que BilbaoBizi es un servicio público, y que debe ofrecerse y desarrollarse «en condiciones dignas». Para ello, piden un aumento del presupuesto que garantice, entre otras cosas, una subida salarial y un aumento de la plantilla.

También hicieron responsable de esta situación al Ayuntamiento, al que acusaron de haber elegido la opción más barata, «por encima del parecer de sus propios asesores». Lamentaron que llevan meses negociando, pero que el Consistorio «mira para otro lado».