Pablo GONZÁLEZ
Periodista
ELECCIONES REGIONALES EN RUSIA

El partido de Putin canta victoria, pero con sus peores resultados

El autor repasa los resultados de las diversas citas electorales que se celebraron en Rusia el domingo pasado, cuando se agruparon comicios locales y regionales. El partido gobernante, Rusia Unida, se impuso en la mayoría de contiendas, pero la baja participación da muestras del cansancio de la sociedad y de la falta de alternativas.

Rusia celebró el domingo pasado más de 60 elecciones de varios tipos. En algunas regiones se elegía al gobernador, en otras el parlamento regional y en algunos sitios a los alcaldes. Se han cumplido los pronósticos y Rusia Unida, el partido del presidente, Vladimir Putin, se ha impuesto en líneas generales, pero con unos resultados peores de lo esperado. La participación, por lo general, ha sido muy baja.

Rusia Unida ha ganado en casi todos los comicios a lo largo y ancho del país. Los 16 nuevos gobernadores son los candidatos apoyados por el Kremlin. Además, en 13 de los 14 parlamentos regionales ha ganado Rusia Unida, y solo en la región de Jabárovsk, en Siberia, ha ganado el representante del LDPR, partido nacionalista con representación parlamentaria a nivel nacional. Esta derrota estaba pronosticada, en Jabárovsk ya había un gobernador del mismo partido. Otros resultados, aunque sean victoriosos, dejan más tocada a Rusia Unida.

Uno de los más llamativos ha sido el de la ciudad de Sevastopol, la única de estatus federal, considerada por sí misma componente de la Federación Rusa, junto a Moscú y San Petersburgo. En esta urbe de Crimea, la participación ha sido del 26% frente al 53% registrado en 2014, cuando entró a formar parte de Rusia tras anexionarse esta la península de Crimea. En votos, Rusia Unida ha obtenido el 38%, frente al 76% hace cinco años. Esta ciudad es un importante puerto militar y expertos locales calculan que el voto de los marineros y tropas supone históricamente un 10%-15% de apoyos para el partido gobernante. Teniendo en cuenta ese detalle, es más evidente aún más la caída del partido de Putin.

En Moscú, Rusia Unida ha ganado las elecciones, pero su victoria, con solo un 21% de participación, tampoco ha sido tan clara como se esperaba. . Por un lado, han utilizado trabas administrativas para negar la participación en los comicios a los candidatos independientes, opositores de fuera del sistema político establecido. Aun así, Rusia Unida ha ganado en 25 de los 20 distritos electorales de la capital. En el resto, han vencido candidatos de otros partidos registrados legalmente y que, en la mayoría de casos, apoyan al poder establecido. Una muestra más del desgaste del partido en el poder es que los 25 ganadores se han presentado como candidatos independientes a pesar de representar a Rusia Unida, y durante la campaña han evitado al máximo la utilización de la simbología del partido.

Los observadores o la propia Comisión Electoral Central rusa no han detectado grandes irregularidades a pesar de que ha habido varias denuncias y material gráfico en las redes sociales sobre cómo se efectuaban depósitos masivos de papeletas en las urnas. Aun así, la Unión Europea no reconoce parte de estas elecciones, concretamente las celebradas en Crimea, ya que para Bruselas es un territorio ucraniano ocupado ilegalmente por Rusia. Eso, probablemente, afectará a las relaciones diplomáticas entre Moscú y los países miembros del bloque, pero no queda muy claro cómo se hará para sancionar solo a una parte de los cargos electos rusos, los que representan a Crimea.

El Kremlin ha mostrado su satisfacción con los resultados. Dmitri Peskov, secretario de Putin, ha subrayado que el partido, con sus más y sus menos, ha demostrado su liderazgo político. Las autoridades han abierto una investigación sobre el hecho que Facebook y Google hayan mostrado mensajes electorales el día de la votación, algo prohibido por la legislación rusa. Las autoridades, con la supuesta experiencia que tienen en influir en elecciones extranjeras, tienen claro que no quiere ninguna injerencia exterior en sus comicios.

El alcalde de Moscú, Serguei Sobyanin, la destacado la gran competencia que ha habido por cada uno de los 45 puestos de diputado municipal, pero obvia en su análisis el hecho de que no haya podido participar ningún candidato independiente, varios de ellos arrestados entre 10 a 50 días por protestar en las semanas previas a las elecciones.

La oposición situada fuera del sistema, cuyo representante más popular es Aleksei Navalni, también canta victoria, aunque en su caso igualmente es discutible. El Fondo de la Lucha contra la Corrupción (FBK, por sus siglas en ruso) lanzó una campaña denominada «votación inteligente» con el objetivo de derrotar a los candidatos de Rusia Unida. La organización analizó cada uno de los comicios y, según los pronósticos, recomendaba a quién votar en cada caso para tener mayores opciones de derrotar al partido en el poder.

El FBK canta como victoria propia cada una de las derrotas de los de Putin, como por ejemplo la del Parlamento regional de Jabárovsk. Una táctica que parece valer a los seguidores de Navalni, pero que los expertos califican de oportunista. No hay pruebas de que la recomendación del FBK haya sido clave en esa u otras votaciones.