El trabajador F.U., de 45 años, falleció ayer al caer a unas cubetas que habían contenido ácido sulfhídrico (H2S) junto a su compañero W.P.R., de 54 años, que fue hospitalizado en estado muy grave. Ambos resultaron intoxicados por la inhalación del gas, que es más pesado que el aire, incoloro y venenoso en altas concentraciones. Fueron rescatados por sus compañeros, que comenzaron las maniobras de reanimación hasta la llegada de los equipos médicos y de dotaciones del parque de bomberos de Zangoza, después de que la sala de gestión de emergencias de SOS Navarra fuera informada del suceso a las 0.46.

La Policía Foral comenzó la investigación de las causas del accidente y el cuerpo del trabajador fallecido fue trasladado al Instituto Navarro de Medicina Legal, donde le debía ser practicada la autopsia.

LAB exigió una «inmediata y exhaustiva investigación» de lo ocurrido y alertó sobre «la peligrosidad añadida a la que se enfrentan los y las trabajadoras contratadas a través de ETTs», que, «además de arrastrar una mayor precariedad laboral, también son más vulnerables, ya que suelen tener menos formación en seguridad que sus compañeros contratados directamente, a pesar de que suelen hacer los mismos trabajos».

Por su parte, CCOO pidió un plan de choque contra la siniestralidad laboral, y exigió al nuevo Gobierno y al Parlamento que en los próximos presupuestos prioricen las políticas de prevención de riesgos laborales». A su vez, UGT lamentó que Nafarroa es «una de las comunidades en la que más crece el índice de accidentes laborales graves», que atribuyó a la precariedad, el incremento de los ritmos, los recortes en la cultura preventiva y al menor control que se ejerce sobre las empresas. Geroa Bai señaló que la prioridad debe ser la creación de empleo de calidad.