GARA
DURANGO

El Metal de Bizkaia «no dará un paso atrás» hasta lograr «un convenio digno»

Trabajadores del Metal de Bizkaia se concentraron ayer ante el Juzgado de Durango en solidaridad con dos compañeros llamados a declarar por «defender el derecho de huelga» y subrayaron que no darán «ni un paso atrás» hasta la consecución de «un convenio digno».

«Nos concentramos aquí para apoyar a los dos trabajadores huelguistas y para trasladar nuestro total apoyo a todos los que han sufrido de múltiples maneras la represión habida en este conflicto, ya que nos han multado, filmado, insultado, y apaleado, aunque pelear por nuestros derechos no será nunca un delito», señalaron en el comunicado conjunto suscrito por ELA, LAB, CCOO, UGT, ESK, USO y CNT.

Ante la declaración en juzgados de dos trabajadores, acusaron a la patronal FVEM y al PNV de «utilizar a la Policía para silenciar» a los huelguistas, algo que «no lo han conseguido ni lo conseguirán».

«Más allá de una mera lucha»

Tras indicar que el sector «ha quedado paralizado» durante las diez jornadas de huelga realizadas este año, censuraron que la patronal, «con su habitual prepotencia, en vez de negociar, ha intentado acallar las movilizaciones».

Consideraron, en este contexto, que la lucha que desarrollan por el convenio «va mucho más allá de una mera lucha sindical, por la importancia que tiene, por ser un sector que arrastra a otros sectores, y, principalmente, por entrar en conflicto directo con la filosofía de la patronal y de los gobernantes, pues exige el reparto de riqueza y pone en duda el modelo de país».

Aseguraron que su tesis queda demostrada en «la actuación de la Ertzaintza y en las palabras del lehendakari, donde se alinea con los explotadores».

Señalaron, de este forma, que el PNV, «una vez más, deja de lado a los trabajadores del Metal de Bizkaia y en general a toda una parte de la sociedad, y con sus palabras demuestra que quieren un sector precarizado y a unos empresarios enriquecidos». Manifestaron que las palabras de Iñigo Urkullu «son el reflejo de unas políticas que venden al pueblo» e insistieron en que «debe dimitir». Esta demanda ya fue reclamada la pasada semana, cuando Urkullu afirmó que la FVEM ha hecho «todo lo posible» para intentar llegar a acuerdos con los sindicatos, que consideró que estaban predispuestos a la huelga.

Acusaron a la patronal de no querer negociar, y precisaron que no tenían noticias de nuevas reuniones de negociación. «Para lo único que se ha expresado la patronal es para insultar a la totalidad del sector diciendo que las huelgas solamente tienen un 20% de seguimiento».

La patronal «no quiere que los trabajadores tengamos sueldos dignos, no quiere mejorar la salud laboral de los trabajadoras, y no quiere que las mujeres tengan una igualdad real en el sector», destacaron antes de apostillar que «quiere que estemos precarizados».