Bernardo, la segunda gran borrasca de la temporada, trajo ayer lluvia y nieve a tierras vascas, provocando pequeñas incidencias en carreteras secundarias.

En Araba, los puertos de Herrera, Zaldiaran, Vitoria y Bernedo tuvieron que ser cerrados al tráfico de todo tipo de vehículos mientras se precisaron cadenas para circular por Azazeta, Opakua y Orduña. En Aiurdin, Salinas y Kurtzeta, la Ertzaintza recomendó transitar con precaución.

En Gasteiz también nevó, aunque no provocó graves incidencias. A la vista de las previsiones meteorológicas, el Ayuntamiento activó la fase de preemergencias del Plan Municipal de Nevadas. Según informó el Consistorio en un comunicado, en esta fase bomberos y Policía local tienen en alerta medios propios por si fuera necesario su intervención.

En Nafarroa, la nieve hizo necesario el uso de cadenas en varias carreteras secundarias. Aunque la alerta por nieve se centra en el Pirineo, a primeras horas de la mañana en diferentes puntos de la geografía navarra, como Iruñerria, cayeron copos que blanquearon coches y el césped. A media tarde no existían problemas para circular por las vías de la red principal de carreteras, y en la secundaria se encontraban cerrados los puertos de Larrau y Belagua, así como la carretera NA-2012 (Cuatro Bordas-Irati).

Además era obligatoria la utilización de cadenas en el puerto de Matamachos y en el acceso a San Miguel de Aralar.

La carretera NA-2316, de acceso a Zulueta desde la Autovía del Pirineo (A-21) se cerró por inundación del paso inferior, y se habilitó un desvío por la carretera paralela.

En Gipuzkoa, un desprendimiento de piedras y tierra provocó un nuevo corte de la carretera N-634 entre Getaria y Zarautz, desde las 10.00. Dotaciones de la Ertzaintza y operarios de Obras Públicas acudieron al lugar para tratar de dejar expedito este vial en el menor tiempo posible.