Una delegación de Elkarrekin Podemos se reunió ayer durante una hora con una representación del Departamento de Hacienda de Lakua. A la salida, Lander Martínez, portavoz del grupo parlamentario, aseguró haber apreciado «el giro del Gobierno a abrirse a introducir cambios que protejan a Euskadi de las consecuencias de la nueva crisis, pero es la primera toma de contacto. Queda ver en qué se concreta la negociación que hoy ha dado comienzo».

Los cambios propuestos por Elkarrekin Podemos ascienden a unos 350 millones de euros, una cantidad que está abierta a la negociación.

Finalizado el encuentro, el Departamento de Hacienda hizo público un comunicado en el que declara la «imposibilidad de incluir en la negociación presupuestaria una posible reforma fiscal», como la propuesta por EP. Tampoco ve factible «el macro plan de empleo» que «excede con mucho la capacidad de maniobra del Ejecutivo».

Ambas partes decidieron continuar con las negociaciones el próximo 22 de noviembre. Para entonces el Gobierno espera haberse reunido con EH Bildu y PP.

Palabras sin números

Por la mañana, EH Bildu hizo también una primera evaluación de las cuentas presentadas por el Gobierno de Lakua, después de que todos los consejeros y consejeras las hayan explicado en la Cámara. Maddalen Iriarte recurrió a palabras del propio consejero de Hacienda, Pedro Azpiazu: «En el fondo no ha cambiado nada». Para este grupo, las bonitas palabras, las etiquetas que acompañaron a la presentación de los presupuestos no están en los números del proyecto.

Iriarte aseguró que EH Bildu tiene «una propuesta para cambiar y corregir este presupuesto», aunque aclaró que primero se lo dará a conocer al propio Departamento de Hacienda. Ambas partes se reunirán la próxima semana.