En su informe presentado con motivo de la Conferencia sobre el Clima de la ONU (COP25) que se celebra en Madrid, advirtió de que 2019 será el «segundo o tercer año más cálido» desde 1850, cuando empezaron a realizarse registros sistemáticos.

«2016, que debutó con un episodio de El Niño de intensidad excepcionalmente fuerte, sigue siendo el año más caluroso», según el estudio. Cada una de las últimas cuatro décadas ha sido más calurosa que la anterior.

Las emisiones provocadas por el ser humano debido por ejemplo a los combustibles fósiles, la construcción de infraestructuras, el aumento de los cultivos y el transporte sumarán un nuevo récord de concentración de dióxido de carbono, lo que aumentará el calentamiento, según la Organización Meteorológica Mundial (OMM).

Los océanos, que absorben parte de los gases de efecto invernadero, siguen registrando temperaturas récord y una mayor acidificación, lo que amenaza los ecosistemas marinos de los que dependen miles de millones de personas para alimentarse o trabajar. En octubre, el nivel del mar también alcanzó un récord, alimentado sobre todo por los 329.000 millones de toneladas de hielo fundido de Groenlandia en un año.

En el primer semestre de 2019, hubo más de diez millones de desplazados en el interior de sus países, según el Observatorio de Situaciones de Desplazamiento Interno. De este total, siete millones lo hicieron por causas relacionadas con fenómenos meteorológicos extremos como tormentas, inundaciones y sequías, una cifra que podría totalizar 22 millones para el conjunto del año.

«Una vez más, en 2019, los riesgos ligados al tiempo y al clima golpearon duro. Las olas de calor y las inundaciones que antes sucedían una vez por siglo se están convirtiendo en eventos regulares», dijo el secretario general de la OMM, Petteri Taalas. En 2019 se registraron sequías en América Central y Australia, olas de calor en Europa y Japón, así como supertormentas en el sureste de África y devastadores incendios en Brasil y California.

Subrayó que «la pluviometría más irregular» supondrá «desafíos considerables en materia de seguridad alimentaria para los países más vulnerables».