Iñaki IRIONDO
GASTEIZ
PROYECTO DE PRESUPUESTOS DE LAKUA PARA 2020

Antikapitalistak se suma a las críticas internas al pacto de EP

Antikapitalistak se ha sumado a las críticas internas al pacto presupuestario con PNV y PSE que está forjando Elkarrekin Podemos y asegura que es «el cierre definitivo y doloroso del ciclo del 15M en Euskadi». Ezker Anitza-IU, con dos parlamentarios en la Cámara de Gasteiz, insiste en su voto contrario a las cuentas pactadas por el resto de su grupo.

Tras conocerse el preacuerdo de Elkarrekin Podemos con el Gobierno de Urkullu para permitir la aprobación de los Presupuestos de Lakua de 2020, Antikapitalistak ha mostrado su oposición en las redes sociales. Se suma a Ezker Anitza-IU, que insisten que sus dos parlamentarios votarán que no a las cuentas, pese a las enmiendas presentadas por sus compañeros de bancada.

Antikapitalistak asegura que «el preacuerdo presupuestario firmado por Podemos Ahal Dugu y PNV supone el cierre definitivo y doloroso del ciclo del 15M en Euskadi».

A su entender, «la aprobación de estos presupuestos va mucho más allá de la mejora en partidas puntuales, supone la aceptación de un sistema y modelo de gestión que desde hace más de 40 años viene imponiendo la derecha vasca a la ciudadanía de Euskadi».

Concluye Antikapitalistak que ese pacto con el Gobierno de Lakua «deja a la que fue ‘la herramienta del cambio’ como un agente político más cerca del autodenominado progresismo, totalmente alejada de los valores que la vieron nacer».

Ezker Anitza-IU votará no

Después de haber conocido el anuncio de sus compañeros en Elkarrekin Podemos con las enmiendas que habían conseguido incluir en las cuentas, el parlamentario de Ezker Anitza-IU Iñigo Martínez escribió en twitter que «votaremos que no a unos presupuestos vascos que siguen directrices caducas y que no sirven para afrontar los retos fundamentales de la sociedad vasca, precariedad, desigualdad, transición ecológica justa...»

El otro parlamentario de Ezker Anitza-IU, Jon Hernández, destacó en declaraciones a Europa Press que su partido está «al margen de toda negociación presupuestaria». Aclaró que en el debate de enmiendas a la totalidad mantendrán una posición «contraria» a las cuentas presentadas por el Ejecutivo vasco y votarán su devolución a través de las enmiendas de EH Bildu y PP.

La coordinadora general del partido, Isabel Salud, asegura que el presupuesto es «muestra de un modelo económico y social que no resuelve los principales problemas de la mayoría social trabajadora».

Denuncia de EH Bildu

Por otra parte, a preguntas en una rueda de prensa, la portavoz parlamentaria de EH Bildu, Maddalen Iriarte, afirmó que «Podemos ha quedado atada de pies y manos y ha renunciado a construir una alternativa al actual Gobierno desde la izquierda. ¿Eso es la izquierda útil? Útil sí, pero no para la gente, sino para el Gobierno del PNV».

Por la tarde, tras conocerse las enmiendas presentadas por Elkarrekin Podemos, EH Bildu criticó no solo lo relativo a la RGI, sino que también denunció que la ley exige que se consignen para 2020, 100 millones para la sostenibilidad enérgica, «pero EP también ha renunciado a ese punto».

Según ve EH Bildu en una enmienda de EP, «lo acordado reduce a solo 10 millones la cantidad que el Ejecutivo dedicará en 2020 a financiar acciones municipales contra el cambio climático, y difiere al menos hasta 2024 la inversión completa de los 100 millones: 13 millones por año en 2021, 2022 y 2023 y los 41 restantes de 2024 en adelante».

 

La coalición acepta que la RGI se quede en 694 euros en lugar de los 1.026 que fijaría la ley

Elkarrekin Podemos, en su camino hacia la aprobación de los presupuestos del Gobierno de Lakua, ha aceptado que la subida de la RGI se quede en el 4%, frente al 8% que demandaba. Cabe recordar que el año pasado la coalición morada exigía revertir los recortes de años anteriores y recuperar la cifra del Salario Mínimo Interprofesional que marca la ley aprobada en 2008 y que la coalición reclamaba hasta hace poco como base. Esto supone 694 euros en lugar de 1.026.

EP y Lakua han acordado una subida del 4% de la Renta de Garantía de Ingresos, que en su prestación básica supone pasar de 667 euros mensuales a 694 euros. En propuesta presentada por la coalición morada al Departamento de Hacienda, la exigencia de subida era del 8%, frente al 2% que ofrecía el Ejecutivo de Urkullu. Es decir, EP rebaja 4 puntos su demanda y el Gabinete lo sube apenas la mitad, 2.

También es preciso recordar cuál era la pretensión de EP para el presupuesto del año pasado: revertir los recortes en cuantías y condiciones de acceso a la RGI aplicados en 2011 y recuperar la conexión con el Salario Mínimo Interprofesional perdida en 2017. Según la ley de la RGI de 2008, esto supondría que la prestación básica mensual debería ser de 1.026 euros en doce pagas, es decir, el 88% del SMI previsto para 2020, que es de 14.000 euros anuales.I.I.