AFP-GARA
POLÍTICA DE AHORRO EN EL ESTADO FRANCÉS

«Livret A», una cartilla de ahorros no tan popular como parece

El anuncio realizado por el Gobierno francés de reducir la tasa de interés del Livret A, al 0,5% a partir del 1 de febrero, ha retumbado entre la opinión pública como un trueno pero no debería suponer un «big bang» para este depósito no tan popular como suele decirse y cuyo rendimiento ya lleva tiempo por debajo del índice de inflación.

El Livret A es una cuenta de ahorro con remuneración fija cuyos fondos están disponibles en todo momento. Es gratuita y los intereses generados quedan exentos del IRPF y de otras contribuciones sociales. El Estado fija su tasa de interés dos veces por año. Todas las entidades bancarias pueden ofrecer una de estas cuentas.

Actualmente da un 0,75% de interés anual, lo que cambiará a partir del 1 de febrero, ya que el Gobierno francés ha anunciado que caerá al 0,50%.

Muchas cuentas con pocos efectivos. Cerca de 55 millones de personas disponen en el Estado francés de un Livret A, lo que a menudo lleva a los analistas a señalar que se trata de una libreta de ahorros «popular». Pero lo cierto es que la mayoría de estas cartillas están poco abastecidas, cuando no prácticamente vacías (para su apertura basta con depositar entre 1,5 y 10 euros). Y es que la tenencia de productos de ahorro regulados, de los que el Livret A es una parte, se concentra cada vez más.

Así, las cartillas con un montante inferior a 1.500 euros representan el 60% del número total y tan solo suman el 3% del saldo. Y las que tienen 150 euros o menos son el 40% del total.

A la inversa, «el 20% de los Livrets A con más dotación representan cerca del 80% de los ahorros» y «el 20% de los LDDS (Libreta de Desarrollo Sostenible y Solidario) mejor dotados representan el 55% del saldo total», según indica el Observatorio del Ahorro Regulado (OER).

A finales de noviembre, el ahorro total depositado en estos dos productos alcanzaba cerca de 409.000 millones de euros, de los cuales unos 300.000 millones estaban en el Livret A.

Un bolsillo de precaución. De estas cifras se desprende que muchos hogares utilizan el Livret A, de entrada y sobre todo, como una reserva para hacer frente a los tiempos difíciles, más que para dotarse de un patrimonio financiero a largo plazo y ganar intereses.

«Históricamente, el Livret A fue creado con fines educativos para alentar a los hogares a acumular ahorros preventivos y de corto plazo», recuerda Philippe Crevel, director del Círculo de Ahorros, un grupo de expertos sobre el ahorro y su regulación.

«Con una tasa de 0,75% o 0,5% no se le saca rendimiento. Por lo tanto, a menudo el Livret A es una especie de antesala de la cuenta corriente», agrega.

Ya ha quedado superado por la inflación. Según el Insee (Instituto estadístico estatal), la subida del índice de precios de consumo se estableció en el 1,1% de media en 2019, después de haber alcanzado el 1,8% en 2018.

Al reducir la tasa del 0,75% al 0,5%, el Gobierno se arriesga a permitir que el valor real de los ahorros confiados al Livret A se deteriore mecánicamente.

Sin embargo, esta situación no es nueva, ya que el interés del Livret viene evolucionando desde hace tiempo por debajo de la curva de la inflación.

«Desde 2016, el rendimiento real del Livret A se volvió negativo, cerrando un periodo de 30 años de rendimiento positivo. Con una inflación que en estos últimos meses ha rondado el 1%, el rendimiento real es negativo, de -0,5%», subraya Crevel.

No obstante, esta situación no impidió a los ahorradores nutrir masivamente sus Livrets A en 2019: entre enero y noviembre, la recaudación neta alcanzó más de 14.000 millones de euros, contra 9.500 millones en el mismo periodo de 2018.

Una repercusión lógicamente limitada. La reducción de la tasa de interés debería tener efectos limitados para los ahorradores, ya que solo una parte de ellos, y a menudo la más privilegiada, puede beneficiarse plenamente de la remuneración de este depósito.

«Remunerado al 0,75%, el Livret A reportó al conjunto de los ahorradores 2.230 millones de euros en un año. Al 0,5%, la ganancia será de solo 1.490 millones, con una pérdida de 745 millones», según los cálculos del Círculo de Ahorros.

«Para un ahorrador que tenga un Livret A con 10.000 euros, la pérdida es de 25 euros al año (50 euros en lugar de 75). Para quien llegue al límite máximo de 22.950 euros por titular, la pérdida es de 57,375 euros», añade el gabinete. Es decir, para las muy numerosas cartillas dotadas de menos de 1.000 euros, la pérdida será como máximo de 2,5 euros al año.