La obra de Ipurua no estará finalizada hasta verano, lo que supone prácticamente un año de retraso sobre los plazos inicialmente previstos. Eso si se cumplen las nuevas fechas anunciadas ayer por el club, desde donde se asegura que la obra civil de los bajos de las Tribunas Oeste y Sur, que después habrá que equipar, culminarán en abril, mientras el resto de instalaciones, incluyendo el nuevo campo anexo, estará disponible para el arranque de la próxima temporada.

Es decir, que la última fase de la remodelación de Ipurua, la más costosa por envergadura y presupuesto, necesitará el doble de tiempo del que se había calculado. Pero no habrá explicaciones públicas por parte de los responsables del club. Desde la entidad se habla de un retraso mucho menor y se justifica con los problemas que generó el traslado de una torre de Iberdrola y la expropiación del terreno del convento adyacente, que se prolongó en el tiempo.

Sin embargo, este último asunto ya se conocía cuando, hace un año, se realizó un tour con los medios de comunicación por Ipurua para detallar el estado de las obras. Entonces, enero de 2019, se aseguró que toda la última fase –reconstrucción de la Tribuna Oeste, por aquel entonces aún sin demoler, nuevos equipamientos y nuevo anexo– podrían inaugurarse con el arranque del curso 19/20. Ya en primavera cambiaron los plazos: desde el club se aseguraba que la Tribuna estaría disponible para los abonados a tiempo para comenzar la temporada, y así fue, y que el resto de los trabajos concluirían para enero de 2020. Evidentemente, no ha sido así.

El Eibar explicó ayer que «la obra civil de los bajos de las Tribunas Sur y Oeste está en su recta final, con la previsión de que esté concluída en el mes de abril». Esto solo se refiere al remate del túnel de vestuarios y de la zona entre este y la Tribuna Oeste, la construcción del edificio entre ambas tribunas, que ya está prácticamente concluído y en cuya planta intermedia se ubicará la UCO desde el próximo curso, y los remates de la puerta 1, entre la Oeste y la Norte, por donde accederán prensa y personal de partido.

Todavía faltarán los equipamientos de la Oeste (gimnasio, despachos, ludoteca-guardería, sala de prensa, etc.) y el campo anexo, que dispondrá de un gran aparcamiento en los bajos y una pequeña grada cubierta.