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PEKÍN

Un cambio en el método de detección eleva los muertos por coronavirus

Tras constatar que las autoridades de la provincia de Hubei son incapaces de hacer frente al coronavirus, el Gobierno chino ha purgado a los dirigentes del Partido Comunista de la provincia epicentro del brote y ha modificado su política sanitaria. El cambio en el método de detección ha elevado de golpe la cifra de muertos y afectados.

El coronavirus se cobró solo el pasado miércoles otras 254 vidas en China el pasado miércoles, jornada en la que se confirmaron 15.152 nuevos casos después de que las autoridades sanitarias de Hubei, la provincia donde surgió el brote, cambiasen los criterios para contabilizar a los infectados.

Así, según los datos publicados ayer mismo por la Comisión Nacional de Sanidad, el número total de fallecidos por el COVID-19 –nuevo nombre oficial de la enfermedad– se eleva a 1.367, mientras que el de contagios probados se sitúa en 59.805, un crecimiento de más del 30% respecto a los anunciados el miércoles, lo que ha desatado las alarmas sobre que la crisis pueda ser todavía más preocupante de lo estimado hasta ahora.

El cambio en el sistema de clasificación de casos en la región centro-oriental de Hubei implicó que durante la jornada de ayer se añadieran en esa provincia 242 muertes y 14.480 nuevos contagios al último balance.

Ello representa, con gran diferencia, el mayor número de muertes registrado en un solo día en esa provincia, cuyo récord diario de decesos se había alcanzado el pasado 10 de febrero con 103, aunque la prensa oficial trata de calmar los ánimos asegurando que todo se debe a los nuevos criterios.

Las autoridades de esa provincia explicaron que ahora se incluirán en los cálculos «a aquellos pacientes que han sido clínicamente diagnosticados. Hasta ahora, las autoridades exigían un test estándar de ácido nucleico (para buscar el material genérico del virus). Estos kits no solo escaseaban y eran insuficientes sino que muchos médicos ponían en duda sus resultados.

A partir de ahora basta con que los resultados de una tomografía confirmen la enfermedad para diagnosticar el virus. Las autoridades confían en que este cambio de criterio facilitará «a los pacientes recibir un tratamiento a tiempo».

Purga en la provincia de Hubei

El anuncio fue realizado a su llegada a Pekín por el subdirector de la Comisión Nacional de Sanidad, Wang Hesheng, quien forma parte del comité formado por el Gobierno central para enfrentarse a la epidemia.

Wang fue nombrado director de la Comisión de Salud de Hubei y a la vez el secretario del PCCh dentro de ese organismo tras la destitución de sus titulares, Liu Yingzi y Zhang Jin.

No ha sido la única purga en el seno del partido en Hubei, cuya capital, Wuhan, fue el epicentro en el que surgió este brote.

Tras una reunión del Comité Permanente del Politburó del Partido Comunista Chino, el secretario de la formación en Hubei fue sustituido por Ying Yong, hasta ahora alcalde de Shanghai y afín al presidente, Xi Jinping. También ha sido destituido el secretario del PCCh en Wuhan, alcalde en la práctica de la megalópolis de casi 12 millones de habitantes. Algunos expertos consideran que, con estas purgas, el PPCh pretende apaciguar los ánimos, caldeados desde que estallara una inusual tormenta de críticas por la gestión inicial de la epidemia, en particular tras la muerte la semana pasada del doctor Li Wenliang, el primero en dar la alarma y ser reprendido junto con otros médicos después por «difundir rumores».

Días después de que estallaran las críticas, amplias en las redes sociales chinas, el presidente Xi reapareció en público –portando mascarilla– al visitar una comunidad de vecinos y un hospital de Pekín para autoproclamarse «comandante en la lucha del pueblo chino contra el coronavirus».

La campaña se completa con pantallas gigantes con mensajes de aliento como «¡Ánimo, China!» y con pancartas en las zonas turísticas de Pekín con lemas como «La prevención y el control de la epidemia son responsabilidad de todos».

Aval médico al nuevo criterio

Dos profesores de la Universidad de Hong Kong, expertos en epidemias y patologías, saludaron el cambio de criterio aunque lamentaron que se desconozca cómo los nuevos casos están distribuidos en el tiempo, ya que los infectados confirmados el miércoles pueden haberlo estado ya desde enero.

«Tiene mucho sentido incluir a los probables, es un movimiento delicado modificar el criterio, pero es bueno cambiarlo ahora», afirmó el británico Benjamin Cowling, codirector del Centro de Epidemiología de Enfermedades Infecciosas de la Universidad de Hong Kong.

El australiano John Nicolls, profesor de Patología Clínica en esa universidad y miembro del equipo de investigación que logró aislar el virus del Síndrome Respiratorio Agudo Severo (SARS) en 2003, destacó que «ningún test es totalmente preciso» para diagnosticar el nuevo patógeno, pero constató que su índice de mortalidad es menor al de su predecesor.

Japón suma tres personas fallecidas fuera de China

Japón informó del fallecimiento de una mujer de 80 años contagiada con el nuevo coronavirus, lo que eleva a tres las víctimas mortales de la epidemia fuera del territorio de China continental (una en Hong Kong y otra en Filipinas).

Japón, con 250 personas que han dado positivo en el contagio del coronavirus, es el país con mayor cifra de infectados exceptuando a China, la mayoría de ellas (218) pasajeros o tripulantes de un crucero que llegó a la ciudad de Yokohama, al sur de Tokio.

Las autoridades aún no han podido establecer cómo pudo contagiarse la mujer de Kanagawa, que nunca había viajado fuera del país. Treinta personas más también están contagiadas, algunas de ellas japoneses residentes en Wuhan. Un taxista de Tokio también dio positivo ayer.

Un crucero con más de 2.000 turistas a bordo procedente de Hong Kong y con una persona que tiene síntomas de la neumonía de Wuhan arribó ayer a Camboya tras ser rechazado en otros cinco países, incluida la ciudad de Yokohama.GARA