La expansión del coronavirus por el mundo dio un fuerte varapalo a los mercados de renta variable, que se hundían desde el inicio al conocerse las muertes del norte de Italia y todas las drásticas medidas tomadas para tratar de frenarlo. El riesgo de pandemia es ahora una realidad que ya no se puede ocultar por más tiempo, tras conocerse casos en 35 países. La crisis sanitaria, la peor en China desde 1949 según el presidente Xi Jinping, lleva camino de convertirse también en un notable factor desestabilizador para la economía mundial, a pesar de que sigue siendo pronto evaluar su verdadero impacto.

El Ibex, en su mayor caída desde el referéndum del Brexit, fue arrastrado a la baja hasta entrar en pérdidas anuales. Hoy abrirá con 9.483,50 puntos, después de despeñarse un 4,07%, equivalente a 402 puntos. Como resultado, cede un 0,69% desde el inicio del ejercicio. Lo mismo sucedía en el resto de Europa, con varapalos en Fráncfort (con -4,01%), París (-3,94%) y Londres (-3,34%).

En Milán, el desplome era del 5,43% ante el avance letal del coronavirus por el norte de Italia y el miedo a un daño serio en su economía.

En Wall Street, como adelantaban los futuros, tampoco hubo escapatoria. Los tres índices principales sufrían perdidas superiores al 3% a la hora del cierre en Europa.

Ningún valor del Ibex acabó al alza. Al frente de los desplomes se colocaron las firmas del sector turístico. IAG se hundió un 9,43% y Meliá, un 7,82%. Con caídas superiores al 6% terminaron Mediaset, ArcelorMittal e Inditex. Entre los pesos pesados, Repsol bajó un 5,35%; Santander, un 4,27%; y BBVA, un 3,87%. Hasta un total de 25 valores recortaron más de un 3% a sus precios, mientras que Viscofán (-0,38%) registró la pérdida más leve.