Iñaki IRIONDO
GASTEIZ

Nadie en Lakua propuso aplicar la Ley de Gestión de Emergencias

Ante la catástrofe de Zaldibar, nadie en el Gobierno ni en la Comisión Interinstitucional propuso la aplicación de la Ley de Gestión de Emergencias que prevé la posibilidad de que el lehendakari asuma la dirección de todas las actividades de respuesta. Se habría constituido así ese «mando único con galones» que el consejero de Medio Ambiente, Iñaki Arriola, echaba en falta públicamente el pasado fin de semana.

El domingo, en una entrevista en “El Correo”, el consejero de Medio Ambiente, Iñaki Arriola, aseguraba que «ha faltado un mando único con galones para solucionar la crisis de Zaldibar» y reconocía la «descoordinación en los primeros momentos». Preguntado ayer el portavoz del Ejecutivo, Josu Erkoreka, sobre si en el Consejo se había hablado de esto o tenía alguna opinión al respecto, respondió que en la reunión no se había tratado el tema ni él tenía una posición como portavoz que pudiera hacerse pública.

Una ley de 2017

La existencia de ese «mando único con galones» que reclamaba el consejero Iñaki Arriola, está prevista en la Ley de Gestión de Emergencias, cuyo texto refundido es de 2017. Ahí se establece la posibilidad de que se declare la situación de emergencia catastrófica, lo que «supondrá la asunción por el lehendakari de la dirección de todas las actividades de la emergencia, pasando a su directa dependencia la estructura organizativa del Plan de Protección Civil de Euskadi». Además, se recoge que «estará asistido por un gabinete de crisis formado por un número reducido de miembros del Consejo de Gobierno, cuya composición y atribuciones se determinarán reglamentariamente».

Preguntado el portavoz del Ejecutivo sobre si no se había planteado la aplicación de esta ley, mostró inicialmente un gesto de sorpresa, contestando a continuación que «es una pregunta a la que no le puedo dar una respuesta segura, porque yo no estuve en primera línea y no me consta que se planteara la aplicación de esas previsiones legales».

Luego añadió que el lehendakari ya tomó la iniciativa enviando al lugar a la consejera de Seguridad, pues inicialmente la emergencia era un derrumbe sobre la autopista. Las decisiones se fueron tomando, según Josu Erkoreka, a medida que se fueron conociendo nuevos datos y se fueron incorporando más departamentos e instituciones como la Diputación de Gipuzkoa, responsable del tramo de la AP-8 afectada por el vertido.

Josu Erkoreka quiso precisar después que «a mí no me consta, ni tampoco en la mesa de coordinación interinstitucional se ha invocado por ninguna parte la aplicación de esta ley. En los foros en los que he estado presente, incluida la comisión interinstitucional del día 10, nadie invocó la aplicación de esa ley ni la oportunidad de esa aplicación». En resumen, «nadie la echó en falta en un marco en el que ya había una coordinación».

EH Bildu lo propuso el día 10

Sin embargo, la oportunidad de la aplicación de esta ley sí se puso sobre la mesa públicamente en una rueda de prensa que EH Bildu ofreció el mencionado 10 de febrero, por la mañana, en el Parlamento, poco antes de que por la tarde el lehendakari procediera a la convocatoria de elecciones. El parlamentario Mikel Otero preguntó públicamente al lehendakari «si estamos ante una situación de emergencia catastrófica o no», para añadir que si así era «tenemos una Ley de Gestión de Emergencias y un Plan de Protección Civil de Euskadi que pide que se ponga él al frente de la coordinación».

Añadió Mikel Otero la necesidad de «mando único y coordinación» y no de dos viceconsejeros dando versiones cambiantes. Además, públicamente, EH Bildu se puso a disposición del Gobierno para ayudarle en sus necesidades para solucionar esa crisis, recordando su implantación institucional y municipal.