GARA
DONOSTIA

El Mapa Térmico de Tecnalia contempla que Donostia eleve su temperatura casi 3 grados para el año 2100

Donostia elevará su temperatura casi 3 grados para el año 2100, según se desprende del Mapa Térmico realizado por Tecnalia, proyecto ligado al Plan de Adaptación al Cambio Climático del Ayuntamiento. En concreto, se prevé un aumento de la temperatura máxima en torno a 2,8 grados y un incremento de entre 5 y 15 noches más al año con temperaturas mínimas superiores a 20 grados.

En rueda de prensa, el concejal de Ecología, Enrique Ramos, explicó que con este estudio se ha analizado la incidencia de la temperatura en la capital guipuzcoana. En ese diagnóstico se indica que el escenario «más negro» del cambio climático se prevé para el año 2.100.

Las proyecciones estiman un incremento de entre 2 y 4 olas de calor más al año para finales de siglo que, junto al incremento de las temperaturas máximas diarias y mínimas nocturnas, «tienen un efecto directo en la salud». Además, el análisis destaca que la temperatura superficial media del mar ha aumentado 0,19 grados por década en el periodo 1980-2015.

La frecuencia, la intensidad y la duración de las olas de calor «se verán incrementadas en los años venideros». Entre los impactos negativos de las olas de calor destaca «el asociado a un incremento de la mortalidad, tal y como evidencian diversos estudios científicos», apuntó Ramos, quien recordó que «las olas de calor acarrean implicaciones considerables para la calidad del aire y la demanda de energía por el aire acondicionado de las viviendas».

El objetivo ha sido elaborar un mapa térmico de Donostia a partir de la información cartográfica y meteorológica disponible. Para su elaboración se ha utilizado el modelo de clima urbano de meso-escala Urbclim, desarrollado por VITO1 y con el que Tecnalia tiene un acuerdo de colaboración.

Los resultados del modelo se ha validado con datos de estaciones meteorológicas disponibles. Una vez finalizado el proceso de validación, se han elaborado y mapeado diferentes índices térmicos. En ese sentido, se ha modelizado la temperatura de la ciudad a partir de la información meteorológica del año 2003, por ser «un año especialmente caluroso que podría representar la situación climática futura bajo escenarios de cambio climático».

Tejados y patios con vegetación

El concejal de Ecología señaló que, para paliar el impacto del incremento de temperatura y las olas de calor, «los sistemas basados en la naturaleza, como pueden ser tejados verdes o patios con vegetación son aliados importantes».

De este modo, en el marco del Life Integrado UrbanKlima, se va a hacer un catálogo de soluciones basadas en la naturaleza que se pueden incluir en la ciudad para paliar el impacto de la temperatura. «Estas soluciones ya han sido adoptadas en numerosas ciudades como París o Copenhague, donde existe una estrategia de azoteas verdes, en la que edificios nuevos con tejados planos deben ser verdes desde el 2020», concluyó Ramos.