Aritz INTXUSTA
Elkarrizketa
MANUEL CARPINTERO
GERENTE DE ATENCIÓN PRIMARIA EN NAFARROA

«Los rastreadores deberán ser más, porque la idea ha funcionado en otros países»

Superado el pico, el control de la epidemia ha pasado de las UCI a los centros de Atención Primaria, que se encargan ahora de detectar y seguir los nuevos casos. Carpintero, médico de familia, es el responsable de este área en Nafarroa.

El sistema de detección del covid en Nafarroa depende de su Gerencia, de Atención Primaria. ¿Cómo están funcionando?

Desde que pasamos a fase 1, el Ministerio propuso dos líneas estratégicas importantes. La primera es ser capaces de confirmar casos mediante una prueba PCR en menos de 24 horas tras la detección de un sospechoso. Por eso, ahora cuando un paciente telefónicamente o en el centro de salud manifiesta síntomas que al profesional le puede hacer pensar en un covid, lo primero que se hace es pedir la PCR. Desde el lunes de la semana pasada, somos capaces de hacer esto en todos los ámbitos del sector de la salud, no solo en Atención Primaria (AP), también en las Urgencias hospitalarias y extrahospitalarias. Si quieres, te digo los síntomas.

Adelante. ¿Por qué no?

Fiebre, tos, disnea, dolor de cabeza, dolor de garganta, malestar general, diarrea, debilidad… Lo importante es que cualquiera de esos síntomas o varios de ellos tengan un inicio súbito e inesperado.

Un espectro muy amplio.

Obviamente, muchos de esos síntomas no van a ser por covid. Hay otros gérmenes que pueden provocarlos. Sin embargo, lo que está claro es que lo primero es confirmar o descartar un covid.

¿Esa vaguedad en los síntomas es lo que explica que se estén haciendo 1.200 pruebas al día para solo detectar una decena de covid? Movilizar a 1.200 personas al día para que acudan al Refena o los otros puntos de toma de pruebas para las PCR me resulta todo un reto logístico.

Que tanta agente acuda a tomarse muestra se explica por dos factores, en mi opinión. El primero es que muchísimos procesos cursan con esa sintomatología y, el segundo, la preocupación o el temor que existe por la epidemia. Antes, una persona con un dolor de garganta no se plantearía hacer nada. Se tomaría un paracetamol y ya está. El temor hace que se consulte al médico y, como el síntoma cuadra, hacemos la prueba.

Ha hablado de 24 horas. ¿Cómo de importante es ser rápidos?

Urge tener a esa persona controlada para poder hacer un seguimiento. Ten en cuenta que seguimos hablando de casos sintomáticos, aunque sean muy leves, y que luego tenemos los asintomáticos. Lo que estamos viendo, por ejemplo, es que la mayoría de los casos de covid son leves. Al 80% de ellos se les hace un seguimiento domiciliario. Sí que es cierto que al quinto o sexto día, este cuadro leve se puede agravar e incluso resultar fatal. El seguimiento es importante por ese agravamiento, y también para cortar las cadenas contagios.

Desde el lunes de la semana pasada, han comenzado a hacer un rastreo de contactos de los positivos en Nafarroa.

Se trata de una investigación muy activa para ver qué casos han mantenido «contactos estrechos». Un contacto estrecho viene a ser aquella persona que ha estado a menos de dos metros durante más de 15 minutos sin la protección adecuada. Cuando a una persona se le confirma el PCR, un equipo de enfermeras y médicos le llaman para que identifique esos contactos estrechos que ha mantenido. A partir de ahí, esos rastreadores se ponen en contacto para confirmar que el contacto se dio realmente. Si se corrobora, le pedimos a esa persona que esté en aislamiento durante 14 días, porque es el periodo de incubación. Hablo de 14 días desde el último contacto mantenido. Si el último contacto con la persona que dio positivo fue anteayer, el aislamiento comenzaría desde anteayer. Los rastreadores hoy son nueve enfermeras y cuatro médicos, pero casi seguro nos iremos adaptado a cada momento. Dependerá de la evolución de la pandemia, pero tendrán que ser más en lo sucesivo. Los países que mejor resultado están teniendo son los que más han apostado por esta figura. La idea ha funcionado.

En algunos de esos países ni siquiera son sanitarios los que realizan esta labor.

En mi opinión personal, también creo que en un futuro podrían no ser sanitarios. Estamos en este momento valorando el perfil de los profesionales a incorporar. Hemos arrancado así porque queríamos empezar lo más rápidamente posible.

Los sanitarios era lo que se tenía más a mano.

No solo es eso, también es necesario conocer algo de epidemiología... Son conceptos lógicos, pero que son elementales. Lo que sí que quiero es aprovechar esta entrevista para pedir que, cuando se pongan en contacto los rastreadores de Atención Primaria que, por favor, nos atiendan. De eso va a depender el futuro de la pandemia. Estamos buscando contactos de covid, no somos un encuestador al uso al que se cuelga y ya está. Por favor, que nos dediquen tiempo si les llamamos.

¿Han cazado ya algún positivo los rastreadores?

El protocolo es pedir esos 14 días de reclusión en el domicilio. Ese día 14 se harán las PCR. Este fin de semana se harían, por tanto, las primeras pruebas y veríamos si ha dado ya resultado.

Nafarroa está manteniendo unas cifras de contagios llamativamente altas. ¿Dónde aparecen los nuevos casos?

No te quepa duda de que el hecho de que estemos detectando casos es algo positivo. Estamos haciendo muchas más PCR y estamos rastreando mucho en las residencias de ancianos y de personas con discapacidad. En La Misericordia detectamos un positivo y decidimos hacer PCR a todos los residentes, que son entre 200 y 300. Nos salieron 19 asintomáticos.

¿Se refiere e ese pico de 30 casos del sábado pasado? En la información que el Gobierno remitió hablaba de que 24 de ellos eran asintomáticos.

De esos 24 asintomáticos que detectamos, 19 eran de La Misericordia. En este tipo de lugares, no por la edad, sino porque convive más gente y hay mayor carga viral en el ambiente, se da una transmisión mayor.

Entonces, entiendo que ese último pico es porque se atajó un foco de raíz.

Eso es. Y fíjate que de un único sintomático aparecieron 19 asintomáticos. Aunque he de añadir que, aún no sabemos bien por qué, muchos sintomáticos acaban pasando después a asintomáticos. Lo que quiero aclarar es que ese pico, en realidad, responde a que ahora tenemos mucha mayor capacidad de respuesta. Estos días también ha aparecido otro brote menor en una residencia, en La Vaguada, que justificó otro pico. Cuando sale un caso en una residencia tenemos que hacer un análisis exhaustivo, porque son personal vulnerable. Es positivo que aparezcan estos picos... pero mejor sería que no apareciera nadie.

Más allá de los focos puntuales, ¿el resto de casos dónde aparecen? ¿Es en el entorno de Iruñerria? ¿En zonas básicas en concreto? ¿Uno aquí y otro allá?

Los demás casos han sido bastante dispersos.

No le oculto que el interés que tengo detrás de esta pregunta viene dado porque el Gobierno ha estado coqueteando con la posibilidad de que se pase de fase según zonas de salud. Supongo que, ahora que la incidencia es más baja, habrá partes de Nafarroa que lleven 15 días sin casos nuevos.

Las hay. Si la pregunta es si tiene sentido pasar a fase dos por zonas, no te sé responder. Sería una opinión personal. Sí puedo afirmar que la incidencia ha sido muy heterogénea. Dicho esto, Navarra es una comunidad uniprovincial más bien pequeña y no sé si traería más beneficios o complicaciones. En cualquier caso, los contagios que estamos detectando hoy son muy dispersos por toda la geografía. Y son muy pocos si excluimos las residencias de ancianos. Mi hipótesis personal es que este escenario de un caso aquí y otro allá será el escenario en el que nos movamos los próximos meses. Eso sí, siempre que no bajemos la guardia, porque puede haber otro rebrote.

Cuando Nafarroa pasó a la fase 1 con un nivel de contagios más alto que el resto, le preguntaron a Fernando Simón por este caso concreto. Él apuntó que la capacidad hospitalaria de Nafarroa, como es conocido, era muy alta, pero también alabó el sistema de AP. ¿Es una mejor red de AP la responsable de que aquí se detecten más casos?

Nafarroa empezó con una incidencia alta de contagios al inicio de la pandemia que luego se ha ido reconduciendo. Empezamos mal porque no se tuvo suficiente conciencia de la gravedad del problema. Luego nos confinamos y los comportamientos se modificaron. Eso, junto a un mejor manejo del sistema sanitario nos ha llevado a otra situación. Lo que dijo Simón fue que fuimos capaces de controlar la pandemia y que tenemos capacidad de respuesta ante un nuevo brote. Eso se valoró en buena medida en camas de hospitalización de UCI en el primer momento. Ahora que eso ha pasado, el foco cambia a la AP. La AP se va responsabilizando de más actuaciones, empezando por el seguimiento de quienes han salido por el hospital. Los dos parámetros que el Ministerio considera más relevantes son el diagnóstico precoz y el estudio de contactos, y ambos recaen sobre AP.

¿Tanta es la diferencia de Nafarroa con el resto del Estado?

Tenemos una AP aceptable. Yo soy el gerente, me gustaría tenerla mejor y más recursos, pero son unos recursos bastante adecuados en este momento, con la limitación siempre para contratar médicos, porque en el mercado no los hay. En Primaria han salido 26 residentes de Medicina de Familia y vamos a ofrecer un contrato a todos. Queremos tener el máximo de recursos posibles. Pienso que sí que ha habido una gran diferencia con otros territorios porque, en los años de la crisis, Navarra no descapitalizó tanto la AP como otras comunidades. Nuestra AP no tuvo un crecimiento boyante, pero tampoco sufrió grandes recortes. Eso beneficia la situación actual. Durante el pico, se han incorporado más de 40 enfermeras a la AP.

El pico de la pandemia debió ser complejo de manejar.

Hubo que incorporar médicos de mutuas y jubilados, enviar más enfermeras a residencias... Todos esos refuerzos ya se retiraron, pero los que participaron están dispuestos a volver. Esos días contratamos a todos los que vimos disponibles. La intención de esta Gerencia ahora es que algunos de los refuerzos se queden de forma permanente.

Lo intento por última vez. Si Nafarroa pasara de fase por zonas de salud, ¿cuáles serían las zonas básicas candidatas a quedarse atrás?

A botepronto, te diría que las que más incidencia tienen a nivel poblacional. Pero yo no soy un técnico epidemiólogo. Tafalla, Artajona, Sarriguren…

¿No se atendería pues, a los casos nuevos, sino a la incidencia durante toda la pandemia?

Pienso que sí, porque los casos que detectamos ahora son más bien pocos y aislados.