Aritz INTXUSTA

Aiora necesita fisioterapia aunque siga el virus

Si a Aiora no le estira bien los músculos un fisioterapeuta, se le agarrotan y sufre muchos dolores. Ella no nació así, sin capacidad para moverse. Aiora padecía una cardiopatía y fue en una operación por ese problema cuando sufrió el daño cerebral que la postró en una silla de ruedas especial. Ahora apenas mueve músculos de la cara.

Maialen Zabalbeskoa, la madre de Aiora, libra una batalla para que su hija y cientos de casos similares en Nafarroa vuelvan a recibir estas sesiones de fisioterapia, que se cortaron hace dos meses por la epidemia.

No es que este tipo de atención se haya cortado de raíz. Los fisioterapeutas de Osasunbidea han vuelto al trabajo... pero los casos con riesgo de morbilidad no se reanudan y nadie les da una fecha. No hay sesiones de fisioterapia para Aiora, como tampoco las hay para los ancianos y quienes pertenecen a los llamados «grupos de riesgo».

Zabalbeskoa acusa al Departamento de Salud de no haberle llamado, ni explicado nada sobre por qué han cortado a su hija las sesiones de fisioterapia, que no solo le aliviaban de sus dolores, sino que también le ayudan a respirar. No ha habido ni una llamada, ni un correo.... nada desde que le cortaron la atención y le enviaron unos vídeos para que ella realizara unas sesiones que su hija necesita a diario. «No soy fisioterapeuta. Tengo otros dos hijos. Ella tiene el derecho a la atención sanitaria. Yo... solo soy su madre», relata Zabalbeskoa.

Casi mil casos en Nafarroa

La batalla de las familias por la atención de estos casos ha sido constante. Este tipo de tratamientos para niños quedan a caballo entre el Departamento de Educación y el de Sanidad. «Se echan la responsabilidad los unos a los otros», denuncia la Zabalbeskoa. Lo peor de que la competencia esté poco clara es que algunos niños se quedan sin su tratamiento en verano, cuando no hay escuela. Aiora recibía sesiones unos días en la ikastola y otros, en el hospital.

La historia de Aiora es una entre los casi mil casos de menores que necesitan sesiones de fisioterapia en Nafarroa (son 920 según las últimas informaciones publicadas). La presión de las familias por recuperar este servicio ha obligado al Gobierno a dar explicaciones. Ha dicho que se ha vuelto a contactar con las familias. Sin embargo, GARA solo ha tenido constancia de que se esté llamando para ofrecer atención sicológica, no para recuperar la atención que se ofrecía anteriormente.

Cocemfe, la federación de asociaciones de personas con discapacidad física y orgánica, dice que el parón que empezó en marzo ha tenido consecuencias ya irreversibles.

Zabalbeskoa remarca, además, que los médicos de la unidad que atiende a niños crónicos complejos avala la reanudación de las sesiones de fisioterapia.