La secretaria general de LAB, Garbiñe Aranburu, afirmó en la presentación que en el sindicato son «muy conscientes» de que «vienen tiempos muy difíciles para la clase trabajadora», aunque consideró que también es «tiempo de oportunidades» porque, según dijo, la pandemia ha servido para «evidenciar aún más la insostenibilidad de un sistema capitalista, heteropatriarcal y ecocida».

«Se han caído algunos de los dogmas neoliberales y se ha visto que el actual sistema es incapaz de garantizar una vida digna a la ciudadanía», sostuvo la líder de LAB, quien incidió en que «será tiempo de oportunidades si somos capaces de disputar el guión económico y social que se nos va a querer imponer». Así, subrayó la necesidad de «disputar el poder al capital en los centros de trabajo activando luchas sindicales».

Aranburu señaló que «los partidos sistémicos, con el PNV a la cabeza y con la patronal», hablan de «la reconstrucción económica y social y dicen que son tiempos para la colaboración», aunque criticó que «limitan el campo de juego y ya han comprado al árbitro». A su juicio, en esas condiciones las y los trabajadores «no pueden salir ganando el partido».

La central plantea propuestas y demanda «marcos reales de debate» para discutirlas, pero advierte de que no podrán contar con LAB para «reconstruir el actual sistema» en marcos como la mesa socioeconómica del Gobierno de Lakua o las mesas del diálogo social.

«Ya es hora de comenzar a proteger a los trabajadores y dejar de proteger al capital», insistió la dirigente sindical, al tiempo que abogó por poner las bases para «transitar hacia otro modelo», que deberá ser «ecosocialista y feminista».

Mantener el empleo

Aranburu señaló que su prioridad será «mantener el empleo», para lo cual afirmó que es necesario «garantizar el salario en los ERTE, pero también el empleo». Por ello, consideró que un acuerdo para un complemento salarial sin garantía de empleo «se queda corto».

Asimismo, manifestó que las altas tasas de temporalidad han supuesto que «haya un colectivo muy amplio de trabajadores de usar y tirar», principalmente mujeres y jóvenes, y subrayó que hay que «poner fin a esta dualidad del mercado laboral». Llamó a «dignificar las condiciones de trabajo» de las trabajadoras que se han «revelado esenciales» durante la pandemia.

También lucharán por los servicios públicos. De este modo, plantean que hay que transformar el modelo actual «dejando de lado la visión mercantilista que ha estado imperando durante los últimos años y poniendo como prioridad la atención y el servicio a la ciudadanía».

Para ello, opinan que urge «hacer un plan de publificación de los servicios públicos», al tiempo que reclaman un aumento de la inversión en este ámbito, y mejorar las condiciones laborales «estabilizando plantillas, reduciendo los ratios y aumentando la contratación pública».

Aranburu apuntó, además, que el sistema de cuidados «se tiene que reorganizar» y apostó por que sea público. También abogó por cambiar el actual modelo de producción y de consumo, basándose en el «respeto al planeta», así como por una nueva política fiscal para el «reparto más equitativo de la riqueza».

ELA propone un fondo que complemente los ERTE

ELA propone crear un fondo que complemente los expedientes de regulación temporal de empleo de modo progresivo, garantizando el 100% de los salarios menores de 1.200 euros.

Ese fondo llegaría, según el sindicato que lidera Mitxel Lakuntza, para complementar los salarios del personal incluido en los ERTE, especialmente los salarios más bajos. En concreto, plantea que los inferiores a 1.200 euros deberían complementarse al 100%, los inferiores a 1.500 euros al 90% y los superiores al 80%, con una aportación máxima de 400 euros. En la misma proporción, exige que durante el ERTE se completen las cotizaciones a pagar por las empresas.

El sindicato plantea que para su financiación se establezca un recargo al Impuesto de Sociedades y que así, «a través de los beneficios empresariales se garantice la viabilidad de las empresas y el mantenimiento del empleo».

Además de este fondo, el mantenimiento del empleo requiere «una profunda estrategia pública para cambiar el modelo productivo» e instó a los representantes políticos a actuar con «valentía para que se pongan en marcha conversaciones con todos los agentes».

ELA afirmó que Lakua «debe comprometerse y tomar medidas para mantener el empleo, con el fin de evitar la destrucción de miles de empresas y puestos de trabajo a corto plazo» y, por ello, planteó que la puesta en marcha del fondo requerirá «de la implicación de Confebask». GARA