Txisko FERNÁNDEZ
ELecciones en plena crisis sanitaria

Las pautas del distanciamiento marcarán la cita electoral en la CAV

La pandemia del covid-19 ha obligado a cambiar de fechas muchas citas electorales previstas a principios de año por todo el mundo, como ha ocurrido con las autonómicas en la CAV o la segunda vuelta de las municipales en Ipar Euskal Herria. Y, para bien o para mal, las crónicas de los próximos comicios van a llegar cargadas de novedades.

Si todo ocurre como lo ha previsto el Gobierno de Lakua, la jornada electoral del 12 de julio, convocada para renovar el Parlamento de Gasteiz, transcurrirá de forma muy diferente a la del 25 de setiembre de 2016. Tendrá más en común con la segunda vuelta de los comicios que el 28 de junio se celebrará en aquellos municipios de Ipar Euskal Herria en los que no se registró la mayoría suficiente para constituir ayuntamiento en la “inevitable” cita del 15 de marzo.

Fue inevitable porque el Gobierno de Emmanuel Macron no reaccionó a tiempo cuando el nuevo coronavirus ya se había hecho patente como epidemia en Europa. Y a punto estuvo de suceder lo mismo en la CAV, donde Iñigo Urkullu se resistió a suspender la convocatoria lanzada para el 5 de abril a pesar de las recomendaciones cada vez más contundentes que le llegaban desde el ámbito sanitario y la oposición parlamentaria.

Tampoco la fecha del 12J ha sido del agrado de formaciones como EH Bildu y Elkarrekin Podemos, que preferían celebrar estas elecciones más tarde para tener mayores garantías de que tanto la campaña como la jornada clave discurrirán con cierta “normalidad”.

Esfuerzos extras

Las consejeras de Salud, Nekane Murga, y de Seguridad, Estefanía Beltrán de Heredia, fueron las encargadas de presentar ayer «las directrices sanitarias» para este proceso, lo que da cuenta de lo extraordinario que es el escenario en el que se va a desarrollar.

Horas antes, a través de Radio Euskadi, el presidente del Tribunal Superior de Justicia del País Vasco, Juan Luis Ibarra, adelantó que llevar a la práctica estos comicios requerirá hacer muchos «esfuerzos». Incluso, habló de «grandes sacrificios» por parte de los componentes de las mesas y juntas electorales.

De entrada, el Ejecutivo autonómico ha decidido ampliar en 41 el número de locales para «garantizar las distancias». Habrá 761, de los que un centenar son de «nueva ubicación», por lo que mucha gente no votará en el lugar habitual.

En esos locales se habilitarán 2.678 mesas, cada una formada por tres personas, que ocuparán la presidencia y las dos vocalías. Entre el 13 y el 17 de junio, los ayuntamientos designarán a los miembros de mesa y a dos sustitutos para cada uno. Nueve personas para cada mesa hacen un total de 24.102. Están excluidas las personas mayores de 70 años, y a partir de los 65 pueden renunciar en el plazo de siete días.

En los colegios deberán respetarse las pautas que ya hemos interiorizado como normas de comportamiento en espacios públicos: distancia de seguridad de metro y medio, uso de mascarilla, lavado de manos frecuente, y limpieza periódica de superficies y lugares concurridos. En caso de formarse colas, se dará prioridad a las personas vulnerables.

En esta ocasión los integrantes de las mesas no tendrán que tocar con sus manos ni el DNI del votante ni los sobres con las papeletas. En la CAV, desde las elecciones autonómicas de 2012, el sobre lo introduce el propio elector o electora directamente en la urna. No obstante, se les suministrarán guantes de nitrilo y mascarillas FFP2, con las que tendrán que realizar el recuento del sufragio.

Estas medidas especiales van a hacer que el gasto por mesa llegue a los 300 euros, 95 más que en anteriores citas electorales. Es decir, un extra que rondará los 254.000 euros, cuando el Departamento de Seguridad tiene presupuestados 6 millones para esta convocatoria.

Novedades por correo

El capítulo en el que se han incluido cambios más sustanciales es en el del voto por correo de las personas residentes en la CAV. El plazo para solicitarlo estará abierto hasta el 2 de julio.

En principio, hay dos opciones: acudir a las oficinas de Correos para hacer la solicitud en persona, salvo en los casos de discapacidad o enfermedad, en los que se puede delegar en otra persona con una autorización notarial; o acceder a la web de Correos para cumplimentar la solicitud telemáticamente con firma electrónica.

La novedad más relevante está en el paso siguiente: cuando los trabajadores de Correos lleven la documentación al domicilio del solicitante, se podrá aprovechar ese momento para entregar al cartero o cartera el voto en vez de tener que acudir a la oficina postal.

La delegación provincial de la Oficina del Censo Electoral debe enviar esa documentación –que incluye las papeletas de todas las candidaturas– a los domicilios entre el 22 de junio y el 5 de julio. Y el plazo para que el electorado remita el voto va del 22 de junio al 8 de julio.

Según indicó ayer el Gobierno de Lakua, desde el 19 de mayo, cuando se abrió el plazo, el número de solicitudes se ha multiplicado por ocho respecto a las registradas en el mismo periodo hace cuatro años.

En 2016 se enviaron por correo 52.365 votos de electores residentes en Araba, Bizkaia y Gipuzkoa, de los que casi todos fueron aceptados (51.981), que representaron apenas un 3% del total de votantes. Si el ritmo de solicitudes de estos primeros días se mantuviera hasta el final del plazo, el dato sería impresionante, ya que rondaría el 20%.

Ibarra, que comentó que por ahora los datos «son muy similares a otras convocatorias», subrayó que su «preocupación» y la «responsablidad» de la Junta Electoral del País Vasco, que él preside, es que el servicio de Correos esté «en condiciones de facilitar el voto por correo». Añadió que es «seguro que va a haber problemas», dado que el servicio está pasando «por una situación que no es la mejor de su vida como entidad».

Más complicado será ejercer el voto para quienes residan fuera del Estado español y estén registrados en el CERA. En las anteriores elecciones autonómicas llegaron 3.257 de estos votos, menos del 5% de este censo de «residentes en el exterior».

Como indicó Ibarra, en este apartado hay que ser «necesariamente más pesimistas por la sencilla razón de que el servicio de correos internacional está cortado en países muy importantes de Centroamérica y Sudamérica».

En cuanto a la campaña que podrán llevar a cabo las candidaturas, durante los actos públicos también «se evitará el contacto personal, manteniendo la distancia de seguridad establecida», así como la entrega en mano de cualquier objeto o folleto.

Todas estas normas se recogerán en el «manual de instrucciones» que aprobará hoy el Consejo de Gobierno.

Regreso al Consistorio y a las urnas tras estrenar «nueva vida»

El alcalde de Bokale, Francis Gonzalez, de 70 años de edad, no olvidará fácilmente las elecciones municipales de 2020. El primer edil de la localidad adyacente a Baiona, gobernada históricamente por la izquierda, ha regresado hace pocos días al Ayuntamiento y, de seguido, también a la liza electoral. Ello, tras sufrir en propias carnes la embestida del virus covid-19.

Efectivamente, diez días después de celebrada la primera vuelta electoral del 15 de marzo, que ya transcurrió bajo la sombra de la pandemia, Gonzalez debió ser ingresado en el Hospital de Baiona al presentar fiebre y dificultades respiratorias. Varios compañeros más de su Corporación, entre ellos el teniente de alcalde, Jean Pierre Cazaux, y la edil Marie-Jose Roques, debieron ser atendidos en el mismo centro, aunque pudieron continuar su convalecencia en casa. Igual suerte corrió Marie-Ange Thebaud que, tras formar parte de la mayoría municipal que preside Gonzalez, ha pasado a ser su oponente electoral en esta campaña definitivamente insólita para los vecinos de Bokale.

«Lo más prudente hubiera sido esperar un tiempo antes de convocar la segunda vuelta, quizás hasta después de verano», respondía el veterano alcalde y candidato a la reelección al ser preguntado por la convocatoria del 28 de junio. No en vano Gonzalez debió pasar 17 días en el servicio de reanimación del Hospital de Baiona, donde, afortunadamente, desde la semana pasada ya no queda ningún paciente en reanimación debido al coronavirus.

El alcalde de Bokale estuvo ingresado después en torno a dos semanas más en un sanatorio de Kanbo, donde se sometió a terapia pulmonar y estrenó «una nueva vida», según su propia expresión.

Nada más volver al Ayuntamiento, el alcalde ha debido tomar el pulso a la campaña, ya que, tras el susto, la maquinaria electoral ha empezado a funcionar de nuevo también en Bokale, una de las 18 localidades vascas que pondrá las urnas el 28 de junio.

Gonzalez llegó primero en la votación del 15 de marzo con un 41,09% de los votos, mientras que Marie-Ange Thibaut se hizo con un 26,71%. Ayer se supo que la candidata adscrita a la formación Europe Ecologie-Les Verts secundará en la segunda vuelta a Dominique Lavigne. El candidato comunista llegó segundo el 15 de marzo, haciéndose con un 32,19% de los sufragios.

La fusión de las dos listas dibuja, por lo tanto, un panorama inquietante para un veterano alcalde que pudo esquivar a la enfermedad pero al que, a lo que puede observarse, le será más difícil zafarse de sus adversarios políticos. Maite UBIRIA