Marcel PENA
Bilbo

Una grúa y ocho cámaras para llevar la experiencia de NAIZ Kontzertuak a miles de hogares

La iniciativa NAIZ Kontzertuak no sería posible sin algunos de sus colaboradores, como las productoras FOKU y Taom, y Sanagustin Kulturgunea de Azpeitia, donde tendrán lugar los tres primeros conciertos.

Cuando NAIZ programó los espectáculos de NAIZ Kontzertuak en formato «pay per view» el objetivo prioritario era ofrecer un producto audiovisual de calidad para el espectador, además de participar en la reactivación de grupos musicales y salas de espectáculos.

Para lograr ese producto de calidad, la producción audiovisual de NAIZ Kontzertuak correrá a cargo de FOKU y Taom. En concreto, el material técnico que se utilizará para grabar la experiencia y llevarla a las pantallas de los espectadores estará compuesto de ocho cámaras (una “steady cam”), además de dos fotográficas, y una grúa para ofrecer planos generales de la sala.

Un equipo técnico formado por seis operadores, un realizador y varios técnicos de luz y de sonido será el encargado de trasladar la experiencia desde el escenario de Sanagustin Kulturgunea de Azpeitia hasta todas y cada una de las pantallas.

Los espectadores podrán disfrutar del resultado final en directo, en alta calidad (1080p) y en distintos soportes digitales (ordenador, móvil o tableta), en lo que se espera que sea un directo atractivo, dinámico y real, como si fuera un concierto al uso, cara a cara con la banda.

Sanagustin Kulturgunea

Esta experiencia también pretende ser beneficiosa para Sanagustin Kulturgunea de Azpeitia. Esta cooperativa cultural lleva en marcha desde el año 2011, y suele organizar unos 200 eventos al año. En 2020, en cambio, a raíz de la pandemia, se han visto obligados a cancelar las actuaciones musicales y de artes plásticas y escénicas que tenían preparadas desde antes de que empezara el confinamiento.

Desde Sanagustin Kulturgunea también apuntan que la colaboración con NAIZ va a ser beneficiosa, ya que los tres conciertos previstos en el centro, los de Gatibu, Nøgen y Zetak (los tres primeros de esta serie), van a permitirles reactivar poco a poco la actividad.

Además de ser un centro cultural, Sanagustin Kulturgunea cuenta con un servicio de asesoría y hostelería.