Iker BIZKARGUENAGA
BILBO
CRISIS DEL CORONAVIRUS

Nafarroa detecta 21 nuevos casos en el mayor repunte desde el 16 de mayo

Después de mucho tiempo manteniendo una buena tendencia, hasta el punto de que la semana pasada encadenó dos días sin positivos, Nafarroa informó ayer de 21 nuevos casos de covid-19, en el mayor repunte desde el 16 de mayo. La consejera Santos Indurain recordó que «estamos en una situación frágil». Lakua confirmó seis afectados en Orio.

Hay que retroceder bastante en el tiempo, nada menos que un mes y una semana, hasta el 16 de mayo, para encontrar una jornada con 21 positivos nuevos por coronavirus en Nafarroa, el mismo número del que se informó ayer. Desde entonces, la cifra de contagios detectados por PCR siempre había sido inferior, con hitos positivos como los vividos hace solo una semana, cuando no se incorporó ningún positivo más a la lista durante dos días consecutivos, el 14 y 15 de junio.

Este repunte es el más importante desde el inicio de la desescalada, que comenzó oficialmente el 11 de mayo, cuando Nafarroa y el resto de herrialdes de Hego Euskal Herria pasaron a la fase 1, que alivió algunas de las medidas del confinamiento. No es la mejor manera de entrar en la «nueva normalidad», pero habrá que ver cómo evoluciona.

La consejera de Salud, Santos Indurain, explicó que el aumento de casos, al parecer focalizados en Iruñerria y en la zona norte del herrialde –no precisó más –, «tiene que ver con relaciones familiares y relaciones sociales», y no se ha dado en un contexto de centros sanitarios o sociosanitarios, donde, según apuntó, «llevamos a cabo una medidas preventivas muy intensas para blindarlos».

Indurain destacó que el Ejecutivo está haciendo «una identificación, un aislamiento y un seguimiento muy precoz de los contactos» y explicó que la mayoría de los nuevos casos detectados eran «asintomáticos». «Esto obedece a una detección muy precoz para cortar la transmisión», sostuvo, y añadió que de los 21 casos nuevos, 12 corresponden al estudio de contactos.

La consejera, que indicó que cuando los contagios son en la «esfera familiar» el Ministerio no lo considera un rebrote, dijo que al diagnosticarse un caso, «se hace todo un seguimientos de con qué personas ha estado en el ámbito familiar, en el social y en el laboral», e informó de que los contactos identificados han sido en esos ámbitos.

Indurain llamó, además, «a la responsabilidad individual y colectiva» para tratar de frenar los contagios y recordó que «estamos en una situación frágil, en la que todos estamos trabajando, concienciando y haciendo una detección precoz». «Es muy importante que no nos olvidemos de todo lo que hemos pasado y que entre todos apelemos a esta responsabilidad», insistió.

Seis casos en Orio

Probablemente, tanto Indurain como María Chivite, que ayer ofreció más detalles sobre cómo será en Nafarroa la etapa posterior al estado de alarma –Ibai Azparren informa sobre ello en la página 6– tuvieron en mente lo ocurrido en Huesca, donde las comarcas de Bajo Cinca, Cinca Medio y La Litera han retrocedido a la fase 2 después de detectarse un brote en una explotación hortofrutícola, que habría afectado a unas 25 personas.

Está por ver cuál es la evolución del repunte en Nafarroa, pero lo cierto es que en las últimas semanas se están produciendo nuevos focos, que de momento no parecen alarmantes, pero que evidencian que el virus está presente. En este sentido, la consejera de Salud de Lakua, Nekane Murga, confirmó que en Orio se ha dado lo que definió como «acumulación de casos», con seis positivos en pocos días, aunque lanzó un mensaje de tranquilidad al señalar que se han hecho medio centenar de PCR a los contactos y que todos ellos han dado negativo.

Se trata del último foco conocido en la CAV, tras los de Basurto, que se ha extendido a una comunidad religiosa, Txagorritxu y el Hospital Aita Menni, que se dan por controlados.