El cortó la tendencia a la baja que había mantenido desde el martes, parapetándose en el nivel de los 7.200 puntos. Ayer recuperó un 1,16% y el lunes comenzará con 7.321,10 puntos, tras haber marcado en la sesión unos mínimos de 7.183 puntos. Este avance le permitía reducir la caída semanal hasta el 1,11%. En lo que va de año se deja un 23,33%.

Los inversores siguen pendientes de la expansión de la pandemia, que no cesa de crecer en Estados Unidos. Según el epidemiólogo de la Casa Blanca, Anthony Fauci, la apertura demasiado rápida de la actividad en varios estados está perjudicando el control del virus. Además, sostiene que la evolución de los próximos días será aún más negativa y que pasará un tiempo antes de poder reducir significativamente el elevado número de positivos actual.

Por otro lado, los mercados se quedaron sin el faro luminoso de la bolsa china, que frenaba su carrera alcista con un recorte del 1,81% en el índice CSI 300 después de ocho días de subidas alentadas por el impulso de Pekín a la compra de acciones, el control de los rebrotes internos del virus y las señales de recuperación económica.

En los índices europeos fue una jornada de contención de las bajadas de la semana. París, Fráncfort y Milán recuperaban más de un 1%, mientras que Londres sumaba un 0,76%. En Wall Street, a la hora del cierre de las negociaciones en Europa, el Nasdaq 100 cedía levemente, pero el Dow Jones y el S&P 500 se movían en verde.

Los mejores del Ibex eran Sabadell (+4,72%), ACS (+4,43%) y Bankinter (+3,93%). El sector bancario frenó en bloque el goteo de pérdidas de los tres últimos días. Así, Santander, BBVA y Caixabank se anotaban subidas superiores al 2%. Grifols (-1,02%) encabezó las caídas.