La fiesta de la celebración del acuerdo histórico para la recuperación de la UE, que apenas duró unas horas el martes, dio paso ayer a una corrección en los mercados. El Ibex, el peor en Europa, no pudo superar los 7.500 puntos y acabó cediendo los 7.400. Hoy comenzará con 7.390,10 puntos después de restar un 1,39%. Menos sentimiento negativo se percibió en el resto de plazas europeas, aunque también registró pérdidas. París bajaba un 1,32%; Londres, un 1%; Fráncfort, un 0,51%; y Milán, un 0,60%. En los principales índices de Nueva York, destacaban las alzas entorno al 0,20% en el Dow Jones y el S&P 500 media hora después del cierre en Europa. Por su parte, el Nasdaq 100 trataba de sortear las pérdidas en ese momento.

El omnipresente coronavirus sigue lastrando las esperanzas de una vuelta a la normalidad a medio plazo por el aumento significativo de los contagios y el daño económico que está infligiendo a todo el mundo.

En paralelo, los inversores no quitan el ojo a los intercambios de advertencias mutuas de Estados Unidos y China sobre las representaciones diplomáticas, el conflicto del mar de China Meridional, la situación de Hong Kong o la propiedad intelectual en materia tecnológica.

Dentro del Ibex, el foco se puso sobre Iberdrola, golpeado con un descuento del 1,42% a pesar de anunciar un beneficio de 1.845 millones de euros en el primer semestre, un 12,2% más. De los perdedores, destacaron Naturgy (-5,21%), Meliá (-4,06%), Indra (-3,51%) y Amadeus (con un -3,35%). Entre los pesos pesados, todos en rojo excepto BBVA, que repitió precio, caídas notables para Repsol (-3,25%), Inditex (-2,38%) y Santander (-2,12%). Los ganadores fueron liderados por Siemens Gamesa, que sumó un 2,35% a su cotización.