Amparo Lasheras
Periodista
AZKEN PUNTUA

Cambalache tanguero

Allá donde se diga el nombre de Arabia Saudita saltará la alarma. Sobre todo si se está contra las guerras que organiza el sistema para apuntalar su existencia y, de paso, ganar dividendos con la fabricación del armamento que necesita para explotar y saquear los recursos de los pueblos que invade. EEUU, China, India, Rusia y Arabia Saudita son los países que más dinero destinan a la compra de material bélico. Entre los cinco acaparan el 60% de todo el gasto militar del planeta. En el caso de Arabia Saudita, parte de los 51.000 millones que invirtió en 2019 se quedó en la industria armamentista de Euskal Herria y sirvió para bombardear Yemen. Pero esto ya lo conocíamos. Lo que no sabíamos es que un grupo de empresas vascas (entre ellas Tubacex y Aramco), la compañía petrolera más importante de Arabia Saudita, han creado una fundación para apoyar iniciativas de «carácter social y asistencial» y combatir las consecuencias del covid-19 en Euskal Herria. En concreto, lo que han anunciado es que donarán 300.000 euros a repartir entre varios colectivos que trabajan con familias sin recursos. En realidad este tipo de «cambalache» tanguero es muy típico del stablishment. Invado países, mato, robo, no pago impuestos, despido trabajadores, fomento la pobreza, manejo gobiernos, anulo derechos, privatizo... pero no te preocupes, ahora que es verano ven a por la paga que ya te daré algo suelto.