El TAV y el Canal de Navarra están incluidos en la lista de proyectos que la lehendakari navarra, María Chivite, ha presentado para recibir financiación de los fondos europeos destinados a hacer frente a las consecuencias del coronavirus. El valor total de estos proyectos asciende a 3.419 millones de euros, según explicó la lehendakari en una comparecencia ayer tras la sesión de Gobierno.

A juicio de Chivite, se trata de «proyectos maduros» y con un «importante nivel de concreción», lo que unido a la experiencia navarra en ejecución de fondos europeos le hace ser optimista.

La lehendakari añadió que estos proyectos abarcan a los distintos departamentos y cuentan también con una sociedad civil «preparada, organizada y que se implica», por lo que valoró la posición de Nafarroa para «afrontar un futuro más verde, digital y cohesionado».

Junto a ello, destacó que el proyecto central es Navarra Digital, destinado a la innovación digital y en el que participan todos los departamentos del Gobierno navarro, con especial implicación de Educación, Salud y Desarrollo Económico, además de la UPNA y los entes locales.

Con 716 millones de presupuesto, pretende acelerar y potenciar la transformación digital a través de 35 inversiones como la dirigida a los big data en salud para mejorar la atención en todo el ciclo de la vida y al mismo tiempo favorecer atraer a empresas punteras en el sector y ayudar a proyectos emprendedores para desarrollar soluciones basadas en la inteligencia artificial.

En el eje verde Chivite puso como ejemplo de los proyectos de Nafarroa una planta de ensamblaje de baterías con 80 millones de euros de presupuesto, ayudas a entidades locales para la eficiencia energética con 47 millones o una instalación piloto de almacenamiento térmico con 20 millones.

En el área de cohesión social y territorial mencionó el plan de transformación y resiliencia, la «modernización de infraestructuras», donde ha incluido tanto el TAV como la segunda fase del Canal de Navarra, y un plan para construir pueblos y ciudades sostenibles, con un presupuesto de casi 791 millones de euros.

En este mismo eje se refirió a la innovación en los cuidados de larga duración, las estrategias para el aumento de la esperanza de vida libres de discapacidad y el reforzamiento de los servicios sociales.