EDITORIALA
EDITORIALA

La ciencia marca el camino, seguirlo es cosa nuestra

Las respuestas del investigador y profesor de la UPV Joxerra Aihartza en la entrevista que publicamos en estas páginas son un compendio de conocimiento científico y un ejercicio de lógica tan aplastante que lo extraño es que las cosas que expone no sean incontrovertibles en el debate público. Es puro sentido común afirmar, como hace avalado por la cruda realidad que nos envuelve, que la deforestación masiva y el achique de espacios que la humanidad está llevando a cabo respecto a su entorno natural van a multiplicar las opciones de que se produzcan episodios de zoonosis, de que virus u otros patógenos de origen animal acaben infectando a seres humanos. Si se tratara de una lotería, podría decirse que estamos comprando boletos a paladas para que pandemias como la que nos azota desde principios de año se repitan con mayor frecuencia, y quién sabe si mayor virulencia.

¿Por qué seguimos, entonces, arrasando nuestros bosques? ¿Por qué continuamos abriendo puertas y ventanas a enfermedades capaces de poner nuestras vidas en jaque? Aihartza da la clave al señalar al sistema capitalista, que necesita de un crecimiento constante, exige ser alimentado en esos términos y condena a nuestro planeta a ser esquilmado, y que lo hace contraviniendo cualquier principio de precaución sobre su futuro: no es posible mantener este ritmo de depredación natural sin pagar una factura inasumible. Pero al mismo tiempo, también nos interpela a todos nosotros y nosotras, cuando señala la incoherencia de depositar nuestras esperanzas en la ciencia y, al mismo tiempo, obviar todas sus advertencias cuando estas chocan con nuestros intereses y con nuestra forma de vida.

La ciencia es la responsable del salto que la humanidad ha dado en calidad de vida, y también en longevidad, desde sus albores, y es la herramienta que puede evitar un desastre que parecemos empeñados en propiciar. Pero ciencia no es magia; nos da el camino y las indicaciones para recorrerlo, pero los pasos solo podemos darlos nosotros.