Maite UBIRIA BEAUMONT
BAIONA

Los estados modulan a conveniencia la circulación interna en Euskal Herria

La Prefectura de Pau, en coordinación con los delegados del Gobierno español en Nafarroa y la CAV, cerrará desde hoy ocho pasos. En 2020 se selló la muga por el covid-19, ahora por el «yihadismo». Los cierres de frontera afectarán igualmente a cinco pasos catalanes.

Por medio de un comunicado emitido a última hora de la tarde del martes, la Prefectura de Pirineos Atlánticos concretó cómo aplicará la nueva restricción en cuanto a libre circulación de personas en Euskal Herria. Desde hoy quedarán cerrados la mitad de los pasos de muga, aplicando así la vocación expresada por el presidente francés, Emmanuel Macron, en noviembre de 2020, de reformular el Tratado de Schengen.

Macron expuso su idea tras una visita a la muga de Catalunya, donde, como en Euskal Herria, se cerrarán ahora también varios pasos.

La Prefectura de Pirineos Atlánticos alega que con la clausura de «nueve pasos» –ocho situados en Euskal Herria y uno más en Bearn– pretende «facilitar la lucha contra el terrorismo», un objetivo que ya llevó a reinstaurar los controles a finales de 2020 en la muga, donde hay policías de forma permanente. La institución que preside el prefecto Eric Spitz precisa que esa decisión se ha tomado en coordinación con los delegados del Gobierno español en Iruñea y Gasteiz. En aplicación del «principio de colaboración», las delegaciones estatales con sede en Pau, Gasteiz e Iruñea comparten la decisión de aplicar un nuevo by-pass en la circulación entre el norte y el sur de Euskal Herria.

Los pasos que cierran

Desde hoy y por un tiempo indeterminado, se cerrarán dos pasos de Hendaia, en concreto el transporte marítimo hasta Hondarribia, actualmente suspendido por el covid-19, y el puente para el paso de mercancías situado al lado de la estación de la SNCF. Además se clausuran los pasos de Lizuniaga, Lizarrieta, Sara (Venta Berrouet), Izpegi, Aldude y Larraine.

La Prefectura llama a las personas que transitan habitualmente a ambos lados de la muga a utilizar otras alternativas, ya que seguirán abiertos los pasos de Hendaia-Irun (Santiago), Hendaia-Behobia, Irun-Biriatu, Ibardin, Dantxaria y Arnegi.

El precedente más cercano de la decisión anunciada el lunes es el cierre de la muga la pasada primavera. En aquel entonces, la pandemia, con medidas de confinamiento a ambos lados del Bidasoa, fue el motivo que alegaron las autoridades de París y Madrid para decretar la restricción de movilidad. Primero se restablecieron los controles fronterizos el 16 de marzo, que ya implicaron una fuerte restricción al paso de personas, y en abril, para más señas la víspera de Aberri Eguna, las autoridades galas dieron un paso más allá con la clausura total de diez pasos situados en tierras vascas.

La delegación estatal con sede en Pau estima que este nuevo cierre, al afectar a «pasos menores», tendrá un impacto más limitado en la «actividad socioeconómica».

Parco consuelo para una vecina de Etxalar que, en vez de pasar por el alto de Lizarrieta, deberá desplazarse a partir de hoy, si las restricciones ya en vigor por el covid-19 se lo permiten, hasta Bera para pasar por Ibardin a Urruña y desde allí, seguir quemando kilómetros, para llegar por fin a Sara. O para un habitante de Baigorri o de Erratzu, que deberá renunciar al paso más cercano, por el puerto de Izpegi, y optar por otra muga más alejada, caso de Aldude.

El hecho de que en esas zonas vivan menos vecinos, hará eso sí más fácil a la Prefectura gestionar la medida evitando los litigios con las instituciones del sur del Bidasoa por las kilométricas colas que provocan sus decisiones sobre el flujo en pasos tan concurridos como los de Irun-Biriatu-Hendaia.

 

Por Huesca, no por Catalunya

Además de comunicar el cierre de la mitad de los pasos vascos, y del de San Martingo Harria en Bearn, la Prefectura daba a conocer que, por el contrario, seguirán funcionando dos pasos en el Pirineo oscense. Se trata de los de Somport y Portalet.

No ocurrirá lo mismo con Catalunya, donde se ha optado por un cierre similar al que regirá en Euskal Herria, aunque justificado en el caso de la Prefectura de Pirineos Orientales en «la lucha contra la inmigración ilegal», aunque cada vez es más habitual que en sus mensajes, el Ministerio de Interior francés ligue esa cuestión con el yihadismo. Según informaciones publicadas en medios catalanes, a partir del próximo lunes y como en el caso de Euskal Herria «hasta nueva orden», no se podrá transitar libremente entre el norte y sur de Catalunya por Banyuls, Coustouges, Manrell-Las Illas, camino de Aja –entre Palau de Cerdanya i Puigcerdà- y Vignole Entveig.

EH Bildu y EH Bai han denunciado en un comunicado «esta imposición que en nombre del centralismo corta las relaciones familiares, culturales, sociales y económicas entre ciudadanos de Euskal Herria».