Iratxe FRESNEDA
Docente e investigadora audiovisual

El poder de las historias

La curiosidad es la base de cualquier descubrimiento, de cualquier obra creativa. También la experiencia, la vida que vivimos. Creo que, sean cuales sean nuestras profesiones, soñamos con encontrar a alguien que tenga algo que decirnos, que nos proporcione una historia, que nos saque de nosotras mismas, de nuestra mirada. Recuerdo cómo en una ocasión, en Biarritz, una señora entabló una conversación con nosotras sin previo aviso. Fue en la calle, sin presentación alguna; ella se acercó y nos contó la increíble historia de su padre republicano. No volvimos a ver a la señora, pero poco después, en la misma calle, nos cruzamos con Raphael, el cantante. Todo parecía un decorado y nuestro día, parte de un guion algo surrealista.

Esos momentos de guardar, que nos esperan en conversaciones con vecinas, en los vestuarios de las piscinas o en encuentros inesperados... A veces, el azar y la suerte, que nos pilla trabajando, nos hace toparnos con esas historias olvidadas por la selección que hacen “los grandes” relatores de la historia. Muchas de ellas necesitan ser contadas y compartidas.

Las historias nos rodean y deambulan buscando seducir a algún alma ingenua que desee darles forma de libro o película. Sí, vivimos, rodeadas de historias increíbles, sepultadas por la sobreabundancia de otras que, quizá, no lo sean. Leo estos días “Ordesa” de Manuel Vilas y el poder su escritura me conmueve desde la primera página como si fuera una maravillosa historia que un amante nos susurra al oído.