Amaia U. LASAGABASTER
ALAVÉS

Al Alavés se le escapan la suerte y los puntos

Bono detuvo un penalti de Joselu a dos minutos del final.

ALAVÉS 1

SEVILLA 2


El Sevilla propinó al Alavés un empujoncito hacia el abismo. No sorprende, viendo la trayectoria de los dos equipos, pero sí escuece por cómo se desarrolló el partido. La pegada del rival le permitió adelantarse en el primer tiempo, cuando mejor lo hizo su anfitrión, y la fe de éste en la recta final se vio premiada con un penalti en el último minuto... que detuvo Bono.

No tuvo Abelardo el «redebut» soñado en Mendizorrotza. Tras el batacazo de Almería, el asturiano introdujo seis novedades –entraron Pacheco, Lejeune, Duarte, Battaglia, Rioja y Joselu– que hizo temer lo peor cuando, en el minuto tres, encajaba el primer gol fruto de un enorme despiste defensivo; un centro de Navas que En-Nesyri se permitió fallar en su primer remate para acertar en el segundo.

No era el mejor arranque para un Alavés muy necesitado de mimos. Pero los gasteiztarras no quisieron hundirse y tiraron adelante. La recompensa fue inmediata, con un saque de banda de Ximo Navarro que dio un bote altísimo en el área andaluza y ante el que Édgar fue el más listo para restablecer el empate. La jugada no sólo sirvió para devolver las tablas al marcador, también para comprobar los nervios y las dudas que, inesperadamente, mostró el Sevilla cada vez que el balón llegó a su área y que los locales trataron de explotar. Sin acierto, lamentablemente, al contrario de un Suso que, con su equipo aparentemente perdido en el césped de Mendi, se sacó un golazo espectacular desde la frontal del área que volvía a adelantar al Sevilla.

El equipo de Julen Lopetegi se vio más cómodo en la reanudación. Se hizo con el balón, marcó el ritmo y, aunque apenas generó ocasiones claras, también evitó que la incertidumbre regresara a su área.

Hasta que, conforme se acercó el final, el Alavés volvió a dar un paso adelante. Con convicción y también, aunque menos, con juego. Seis minutos después de que el árbitro acertara anulando un gol en propia puerta de Navarro por mano previa de En-Nesyri, otra mano, esta de Koundé, dio un penalti al Alavés. Pero la suerte no estuvo con los albiazules. Joselu lanzó, Bono detuvo y los puntos se escaparon.