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MADRID

El Banco de España advierte de que los ERTE están perdiendo eficacia

El Banco de España advierte de que los expedientes de regulación temporal de empleo (ERTE) están perdiendo efectividad para la vuelta al empleo. Por ello, en su análisis, la institución que preside Pablo Hernández de Cos aboga por focalizar el mantenimiento de las ayudas a las empresas de los sectores más afectados hasta superar la crisis sanitaria.

El Banco de España advierte, en un artículo sobre la evolución de los expedientes de regulación temporal de empleo (ERTE) durante la crisis del covid, de que esta herramienta está perdiendo efectividad a la hora de facilitar la vuelta al empleo de los trabajadores, tras haber resultado muy efectiva en las semanas posteriores al confinamiento domiciliario.

Así, la institución bancaria señala que el retorno al empleo efectivo en el tercer trimestre de 2020 de los trabajadores que entraron en un ERTE en el segundo trimestre fue «muy elevado», pues casi el 70% de ellos se reincorporaron a la actividad, quedándose el 20% en ERTE y el otro 10% en el paro.

Esta reincorporación fue además «muy superior» a la observada entre los trabajadores que perdieron su empleo en el segundo trimestre sin estar cubiertos por esta medida.

De este modo, mientras que casi el 70% de los trabajadores que estaba en un ERTE en el segundo trimestre se reincorporó a la actividad en el tercero, en el caso de los que perdieron su empleo entre abril y junio sin entrar en ERTE, algo menos del 40% volvió a la actividad un trimestre más tarde, lo que supone una diferencia de más de 30 puntos. Esta brecha, asegura, refleja una «elevada efectividad de los ERTE a la hora de facilitar la vuelta al empleo».

«La reincorporación al empleo fue muy superior a la observada entre los trabajadores que perdieron su empleo en el segundo trimestre sin estar cubiertos por un ERTE, lo que reflejaría su buen funcionamiento como mecanismo de ajuste temporal de los costes laborales de las empresas», apunta.

El Banco de España señala que la elevada eficacia de los ERTE en el segundo trimestre fue generalizada para todos los grupos y sectores, ya que «la probabilidad de volver a una situación de empleo efectivo fue muy superior entre los afectados por ERTE respecto a la del resto de los no empleados».

No obstante, a partir del cuarto trimestre se observa que la probabilidad de volver al empleo de los afectados en el tercer trimestre disminuyó «de manera muy apreciable», hasta el 32%. El Banco de España asegura que este descenso reflejaría el freno del proceso de recuperación del mercado de trabajo observado en la parte final del año, «asociado al repunte de la pandemia y a las nuevas restricciones aprobadas».

Además, la institución bancaria que preside Pablo Hernández de Cos señala que la probabilidad observada de que un afectado por ERTE volviera al empleo un trimestre después fue algo menor que la probabilidad de que lo hiciera alguien que había perdido su puesto de trabajo. «Esta evolución podría estar reflejando la persistencia de niveles de actividad muy bajos en algunas ramas, como consecuencia de las sucesivas olas de la pandemia», indica.

A partir del tercer trimestre

El «peor desempeño relativo» de los ERTE que comenzaron en el tercer trimestre en comparación con quienes pasaron a estar desempleados o inactivos en ese período es compartido por la mayor parte de los colectivos, destacando la menor efectividad entre mujeres, jóvenes y aquellos con menor formación.

Por ramas de actividad, el empeoramiento se concentró en la construcción, la hostelería, el comercio y los otros servicios, ya que fueron «las ramas más afectadas por las restricciones durante ese periodo».

Al analizar las características de los trabajadores sin empleo o en situación de ERTE tanto en el segundo como en el tercer trimestre, constata que la probabilidad de vuelta al empleo es «ligeramente más alta» para los jóvenes, mayores y aquellos que tienen estudios universitarios.

La mayor probabilidad de volver a la actividad en el cuarto trimestre si el trabajador estuvo en ERTE en los dos trimestres anteriores fue la misma en casi todas las ramas, excepto en la hostelería, comercio y otros servicios, debido a las restricciones que se aprobaron para estas actividades a final de año.

No obstante, apunta que la probabilidad diferencial de volver al empleo efectivo un trimestre más tarde es mayor en el caso de los trabajadores en ERTE en la industria, «lo que resulta coherente con el carácter más transitorio del impacto de las restricciones sobre esta rama».