Joseba ITURRIA
CICLISMO

Álex Aranburu logra su mejor triunfo en Sestao

No esperó al repecho final y ganó en solitario por delante de Omar Fraile y Pogacar, que se acerca a Roglic.

Álex Aranburu logró ayer la primera victoria de su equipo Astana y del ciclismo vasco de la temporada en la segunda etapa de la Itzulia entre Zalla y Sestao, al marcharse en solitario a diez kilómetros de la meta y llegar con quince segundos de ventaja sobre un grupo encabezado por su compañero Omar Fraile y Tadej Pogacar, que con la bonificación recortó en cuatro su desventaja con Primoz Roglic.

La llegada de Sestao en ligera subida era ideal para que buscara la victoria que se le resistía, pero Álex Aranburu no quiso esperar y aprovechó la superioridad de Astana, que era el equipo más representado en el grupo de cabeza con cuatro corredores.

Atacó en un momento de duda tras la batalla entre los favoritos y fue tal la selección que los líderes se quedaron sin compañeros para trabajar y Ion Izagirre, Omar Fraile y Jakob Fuglsang apoyaron a Aranburu, que llegó a alcanzar 40 segundos de ventaja que supo administrar en la subida final, aunque no pudo alcanzar el liderato.

Caída y abandono de Bizkarra

La buena etapa de Aranburu, Fraile, Mikel Landa, Ion Izagirre, Pello Bilbao y Jonathan Lastra, que entraron en el grupo de los 25 más fuertes, tuvo la cruz para el ciclismo vasco con la caída y la rotura de clavícula izquierda de Mikel Bizkarra, que como explica en su columna diaria en GARA le impedirá tomar la salida en la etapa de hoy.

A pesar de que Maté y Unai Cuadrado se quedaron para llevarle a meta, Euskaltel consiguió colocar a Gotzon Martín y Txomin Juaristi en el segundo grupo a poco más de un minuto. Además Mikel Iturria entró con Jon Irisarri (Caja Rural) en la fuga junto a Hermans (Wanty), Tusveld y Vermaerke (DSM), Gastauer (Ag2r) y Cabedo (Burgos), que fue el último en ser atrapado en La Asturiana tras un ataque de Pogacar y Gaudu.

Luego lo intentaron Schachmann, Higuita, Roglic y McNulty en la parte final del duro puerto y esos ataques redujeron el primer grupo a 25 corredores sin apenas gregarios y al ser atrapados saltó Álex Aranburu.

La tercera etapa llevará a los corredores de Amurrio al primer final en alto de Ermualde, en la Ermita de Santa Lucía, tras tres kilómetros a una media del 15,6%, con otra subida, Malkuartu, a menos de diez de meta para hacer la primera selección.

«Es un sueño ganar en casa»

Aranburu logró a los 25 años la victoria más importante de su carrera, hasta ahora solo había ganado en Getxo en 2018 y dos etapas en Burgos y en la Vuelta a Madrid en 2019. Confirmó además el gran inicio de temporada en pruebas del World Tour al ser sexto en la Omloop, quinto en una etapa de Tirreno, séptimo en San Remo y noveno en la crono de Bilbo de la Itzulia.

El de Ezkio Itxaso señaló tras su victoria que «en el último repecho antes de la bajada he visto la oportunidad de atacar. Teníamos la opción de llegar al sprint, pero vimos que el descenso era complicado y he buscado esa opción. En el último repecho tenía un gran dolor de piernas, pero he podido llegar».

Aranburu añadió que «es un sueño ganar en casa delante de toda la gente. Es muy bonito. En el equipo hemos andado bastante bien, pero no llegaba la victoria aunque sumábamos muchos puestos y esto viene bien. Quedan etapas bonitas y veremos si aguantan las fuerzas».J.I.