Iker BIZKARGUENAGA
BILBO

Araba encabeza la mejora, Bizkaia se queda rezagada

La situación epidemiológica de Hego Euskal Herria mantiene la tendencia positiva de las últimas semanas, y aunque el miércoles se detectaron cuatro casos más que el día anterior, los 549 contagios notificados son 258 menos que el mismo día de la semana pasada (807) y poco más de la mitad de los 1.057 casos reportados dos semanas antes. De este modo, la incidencia acumulada en los cuatro herrialdes es de 334 casos por cien mil habitantes, cuando el mes de mayo comenzó en 486 casos.

La diferencia es notable, y esta buena evolución se hace notar también en la presión asistencial, con 29 pacientes menos en los hospitales respecto al martes, siete de ellos en las UCI. Aunque la ocupación de camas sigue alta, poco a poco se está volviendo a cifras anteriores a la última ola, un poco más lentamente en cuidados intensivos.

Sin embargo, en este cuadro general todos los trazos no son iguales, y mientras hay herrialdes donde el descenso de los contagios ha adquirido una gran velocidad, en otros está costando más doblegar la curva.

El mejor dato desde el verano

Puede decirse, en este sentido, que Araba y Bizkaia constituyen los dos extremos en cuanto al ritmo. Y es que mientras el primer territorio, que tuvo la incidencia más alta hasta después de Semana Santa, está a punto de alcanzar sus mejores cifras desde el verano pasado, en el segundo la mejora se ha producido, primero a trompicones, alternando subidas y bajadas en la incidencia, y luego de forma más moderada que en el resto.

Con los 27 nuevos positivos notificados ayer, Araba se sitúa con una incidencia acumulada de 212,9 casos por cien mil habitantes en catorce días, solo unas décimas por encima de los 212,29 casos que tuvo de forma consecutiva el 13 y el 14 de marzo, y salvo sorpresa mayúscula –debería notificar 83 o más contagios para no hacerlo– hoy va a caer por debajo de esa cifra que marca el punto más bajo de afección del covid desde agosto.

A diferencia de lo que ocurrió en marzo del año pasado, cuando Araba registró durante semanas los peores datos de Euskal Herria, con un fuerte foco de covid localizado en Txagorritxu, en las últimas oleadas este herrialde ha mantenido una evolución mucho más estable que los demás, tanto en las subidas, con un pico de 653 casos el 2 de febrero, como en las bajadas.

Así, mientras Gipuzkoa y Nafarroa han llegado a estar por debajo de 200 casos, y Bizkaia ha estado a punto –tocó suelo en 206 a mediados de marzo–, Araba nunca había estado en esos números hasta ahora.

Bizkaia, de mejor a peor

La tendencia es la opuesta en Bizkaia, que mantuvo las mejores cifras hasta el 17 de abril y que en los próximos días va a superar a Gipuzkoa como herrialde más afectado por el coronavirus. De hecho, Donostia (441) ya tiene mejores datos de incidencia que Bilbo (454).

Durante casi dos semanas, Bizkaia se ha mantenido en una especie de meseta donde la incidencia no acababa de bajar, y el cuatro de mayo tenía un caso más que el 22 de abril, 453 por 452, cuando para esas fechas los demás estaban mejorando claramente. Y aunque en los últimos días sí parece haber asentado una tendencia positiva, el descenso en el número de contagios ha sido bastante limitado.

En este sentido, si Gipuzkoa ha reducido nada menos que en 315 puntos su incidencia desde que tocó techo el 26 de abril, y Araba y Nafarroa han bajado unos doscientos puntos, Bizkaia solo ha logrado pasar de 460 a los 372 del último informe.

Nafarroa, tras ordenar el cierre de los interiores de hostelería en puertas de Semana Santa, empezó a mejorar sus números pronto, el 16 de abril, pero el descenso de contagios ha sido más suave que en Gipuzkoa y Araba, y aunque mantiene la tendencia está por ver el efecto de la apertura de interiores y el fin de las limitaciones horarias.