Como de costumbre el título de la versión doblada pretende hacer spoiler dando información sobre el argumento, y además añadirle un toque supuestamente chistoso para que quede claro que hay humor. En cambio, el título original de “Freaky” (2020), con una sola palabra ya nos da la pista cinéfila para recononer el guiño que hace a “Freaky Friday” (2003), en nuestro mercado retitulada como “Ponte en mi lugar”, una comedia fantástica en la cual Jamie Lee Curtis y Lindsay Lohan intercambiaban sus cuerpos, con lo que una persona adulta tomaba el físico de una adolescente, y viceversa. Aquí el adulto es Vince Vaughn y la joven estudiante Kathryn Newton, por lo que cuando ella está en el envoltorio corpóreo de él hará que el grandullón de Vince Vaughn se marque una baile de animadora para que le identifiquen sus colegas.

Y es que esto es una comedia de terror concebida a modo de parodia del “slasher” adolescente con asesino en serie, producida según los infalibles y rentables métodos de Jason Blum y su compañía Blumhouse, que a pesar de la estrella que encabeza del cartel no se ha gastado ni cinco millones de dólares y ya ha obtenido en la taquilla más del triple. En fin, que si el mundo fuera justo Mark Waters por un lado, y Wes Craven por el otro con su saga “Scream”, deberían llevarse comisión.