M.I.
LA CASA DEL CARACOL

Una leyenda rural y viejas supersticiones

La debutante Macarena Astorga ha tenido la suerte de iniciarse en la realización con un proyecto de encargo que ha podido estrenar en el festival de Málaga, y sin dar tiempo a las primeras reacciones negativas ya ha encadenado su segundo rodaje, con el título provisional de “El refugio”, cambiando el género de terror por el de la comedia. Su ópera prima “La casa del caracol” (2021) es una coproducción con Perú que dispone de un reparto cotizado, gracias a su presupuesto de unos dos millones y medio de euros.

Las reseñas poco favorables de la cita malagueña hablan sobre todo de fallos de guion y de un exceso de guiños a clásicos ochenteros terroríficos, teniendo en cuenta que el planteamiento argumental de partida ya resulta de por si muy manido. La consabida leyenda rural nacida de las supersticiones de su población se traslada a un municipio de la serranía malagueña al que se ha bautizado con el nombre muy común de Quintanar. El escritor interpretado por Javier Rey se retira allí para escribir su próxima novela, pero tanto la dueña de la casa en la que se instala como el resto de convecinos ocultan secretos del pasado que confieren al lugar un halo fantasmal.