El Ibex no pudo defender una sesión más los 9.000 puntos, alcanzados el pasado 14 de mayo, pese a los buenos datos de la zona euro y los récords de Nueva York, donde el Nasdaq 100 elevaba ayer su techo y el S&P 500 no se movía lejos tiempo antes del cierre en Europa. Hoy saldrá desde los 8.954,10 puntos, después de caer un 1,10%. En Europa, todos los índices registraron recortes también notables: Fráncfort bajó un 1,15%, París, un 0,91%, Milán, un 0,94%.

Los analistas e inversores no supieron o no quisieron aprovechar el impulso de la actividad económica en la zona euro, donde los PMI manufacturero y de servicios preliminares del mes de junio rompían al alza los pronósticos. El índice manufacturero llegó hasta los 63,1 puntos, frente a los 62,1 puntos esperados, mientras que el dato de los servicios subía hasta los 58 puntos, por encima de los 57,8 estimados previamente. Por su lado, el PMI compuesto escalaba hasta los 59,2 puntos, desde los 57,1 puntos anteriores, marcando un máximo en quince años. Los inversores no hacían una lectura muy positiva porque esta sólida mejoría podría lanzar la inflación y convertirse en un factor de presión para el BCE.

Tampoco parecía tener eco el mensaje de tranquilidad que Jerome Powell envió el martes a los mercados desde el Congreso de EEUU con su intención de no mover los tipos de interés por la subida de la inflación.

Dentro del Ibex, varapalo para Iberdrola (-3,56%), tras la decisión de la Audiencia Nacional de imputar al presidente, Ignacio Sánchez Galán, en el «caso Villarejo». También cayeron con fuerza Solaria (-4,40%), Telefónica (-2,35%) y Grifols (-1,81%). Los títulos de Acerinox (+1,73%), ArcelorMittal (+1,34%) y Almirall (+1,10%) encabezaron las subidas.