Decenas de alcaldes y cargos electos vascos se dieron cita ayer en Bergara para reafirmar los objetivos e ideales que hace exactamente 45 años, precisamente en este pueblo, expresaron los integrantes del Movimiento de Alcaldes de 1976.

José Luis Elkoro y Patxi Basauri, alcaldes entonces de Bergara y Elgeta, respectivamente, presidieron un acto en el que se rememoró aquel encuentro en el que estuvieron representados 70 ayuntamientos vascos. Junto a ellos, María Ubarretxena, actual alcaldesa de Arrasate, y Gorka Artola, actual primer edil de Bergara y anfitrión, como lo fue Elkoro hace 45 años.

Los cuatro protagonistas fueron los encargados de rememorar lo ocurrido hace casi medio siglo y ponerlo en valor a día de hoy. «Más allá de meras declaraciones, reafirmamos nuestro objetivo de organizarnos como pueblo, sumando la capacidad individual de cada cual a la capacidad colectiva, dotándonos de los instrumentos necesarios para garantizar un proyecto de vida digno y de calidad para el conjunto de la ciudadanía», declararon solemnemente.

«Ahora, decimos al mundo que este pueblo, Euskal Herria, sigue vivo y seguirá vivo, porque ese es el deseo de una gran mayoría de nuestro pueblo», proclamaron desde la plaza de San Martín.

«Ahora como entonces –añadieron–, ante la situación que nos ha tocado vivir –en relación a la pandemia de covid-19–, nos encontramos también con la necesidad de abordar nuevos desafíos y queremos reivindicar claramente que, para poder dar una respuesta positiva a los retos sociales del futuro, la voz de la ciudadanía vasca debe tener su lugar, siendo dueños y dueñas de nuestra palabra y de nuestra decisión».

Izada de la ikurriña

Precisamente por la pandemia, a la que aludieron en el texto, el aforo se vio limitado a la presencia de 70 cargos electos. Tras la izada de la ikurriña en la citada plaza a los sones del aurresku interpretado por los txistularis y bailado por una joven dantzari, todos ellos de esta localidad guipuzcoana, Artola y Ubarretxena entregaron ramos de flores a los representantes del Movimiento de Alcaldes de 1976. Además de Elkoro y Basauri, estaban presentes José Antonio Altuna (Arrasate), Luis Arkauz (Oñati), José Mari Kortabarria (Antzuola) y Jabier Errazti.

Algunos de los mandatarios municipales presentes en el acto fueron Eneko Goia (Donostia), Ima Garrastaxu (Durango), Maite Ibarra (Arrigorriaga), Javi Ollo (Altsasu), Koldo Leoz (Lizarra), Txelo Auzmendi (Asparrena), Jean Tellechea (edil de Urruña), Xabier Lertxundi (Hernani), Izaro Elorza (Oñati), Olatz Peón (Tolosa), Adur Ezenarro (Ordizia), Iñigo Hernando (Galdakao), Txema Molinuevo (Amurrio), Leire Artola (Beasain), Oihan Mendo (Gares), Illart Gumuzio (Igorre), Txomin Sagarzazu (Hondarribia), Jabier Gorbeña (Zigoitia), Iván Rodríguez (Leioa), Ladis Satrustegi (Lesaka) o Adur Ezenarro (Ordizia).

Recuerdo a la primera cita

El documento que fue leído ayer en Bergara comenzaba rememorando la cita histórica. «Aquel día se recordaba la abolición de los Fueros en 1876, tras la de 1839. Al fin y al cabo, los fueros se derogaron con leyes que fueron consecuencia de guerras y actos de fuerza».

Explicaron que los alcaldes y concejales que entonces acudieron a Bergara reconocieron que no les resultaba fácil «cumplir con la responsabilidad que habían asumido de entender y hacer pública la voluntad y decisión del pueblo», pero que, pese a ello, «creían que había llegado el momento de manifestar claramente que los derechos políticos del pueblo son inextinguibles e irrenunciables».

Asumían los reunidos entonces que «el fondo real de la cuestión no estaba en la vieja foralidad, sino en la actualización de esos derechos históricos, en proyectar al presente y al futuro, desde una perspectiva nacional vasca, los ámbitos de soberanía que suponían los fueros».

En esta línea, los electo de 1976 hicieron un llamamiento «a los ayuntamientos y a la ciudadanía vasca para convertir un día de conmemoración y recuerdo en un compromiso de emprendizaje, lanzando a los cuatro vientos el mensaje de que Euskal Herria existía y que tenía derecho a existir y a decidir su destino libremente, sin injusticias ni ataduras, junto con el resto de los pueblos».

Referencia a la pandemia

Uniendo el pasado con el presente, los alcaldes explicaron que «45 años después nuestro pueblo se encuentra también en otra encrucijada», en referencia la pandemia que hace año y medio «trastocó nuestra vida completamente a todos los niveles».

En este sentido, indicaron que «todas las personas hemos tenido que cambiar nuestras aspiraciones, proyectos e interrelaciones, tanto individuales como colectivos e institucionales, con el fin de priorizar la lucha contra el virus».

«La covid-19 nos ha herido profundamente en nuestra vida personal y comunitaria. Y lo más grave de todo, sin duda, ha sido perder a las personas que han fallecido a causa del virus. Desde aquí queremos recordar a las miles de personas de Euskal Herria que nos han dejado por esta enfermedad», lamentaron.

Por ello, advirtieron de que, «si no tomamos decisiones estratégicamente correctas, las desigualdades sociales, las brechas de todo tipo y el riesgo de deriva política irán en aumento debido a la crisis sanitaria, económica y social».

Consideran que para afrontar la difícil situación «resulta de vital importancia la corresponsabilidad política y social. Es la hora de sacar adelante a nuestro país y a su gente, tomando como base el desarrollo económico, la justicia social y la soberanía política».

Tras reconocer las dificultades de ese reto, resaltaron que «ahora, ante el mundo entero, queremos reivindicar que nuestro pueblo, Euskal Herria, está en pie y sigue vivo. Que nuestro pueblo es dueño de sus derechos. Expresamos en voz bien alta que somos un pueblo abierto y avanzado, dispuesto a hacer frente a las amenazas que supone el mundo actual».

Y manteniendo el tono optimista ante el futuro, alcaldes y alcaldesas pusieron en valor «ante quien quiera escucharnos la capacidad del País Vasco para superar los retos más complicados que se le enfrenten».

Petición de relevo

El documento de los electos de ayer y de hoy recoge que «quienes hace 45 años nos convocaron en Bergara comprendieron lo que sentía y lo que necesitaba el pueblo, y así, además de recordar la pérdida de libertades que supuso la abolición de los fueros, con su compromiso político y social nos enseñaron cuál era el camino a recorrer».

Por ello, los alcaldes vascos plantearon la convocatoria de ayer como un punto de inflexión para los ciudadanos abertzales, porque tienen muy claro que «aquella declaración de 1976 sigue vigente y hoy, al cabo de 45 años, nos corresponde seguir adelante hacia la libertad de nuestro Pueblo».