El Ibex no pudo asentarse ayer sobre los 8.800 puntos debido a las caídas del sector eléctrico, penalizado por la decisión del Gobierno español de recortar los beneficios extraordinarios obtenidos con el precio desbocado de la luz. La medida pretende ayudar en la rebaja del precio de la factura mensual de los consumidores.

El Ibex finalizó la sesión en los 8.780 puntos, después de restar un 0,41%. Dentro del sector energético, destacaron las pérdidas de Endesa (-5,81%) e Iberdrola (-1,71%). Aunque cerraron en rojo, Naturgy (-0,54%) y Enagás (-0,37%) sufrieron menos. En el lado de los perdedores, despuntaron los descuentos de grandes valores como Santander (-0,74%), BBVA (-0,30%) y Telefónica (-0,28%). En el sector del turismo, IAG (-3,97%) y Meliá (-1,32%) también registraron caídas. Los mejores del día fueron PharmaMar (+5,81%) e Inditex (+2,31%). La farmacéutica se vio favorecida por un avance hacia la comercialización de un medicamento contra el cáncer.

En las bolsas europeas, hubo distintos signos al cierre. Al alza acabaron Fráncfort (+0,14%) y Milán (+0,39%), mientras que París (-0,36%) y Londres (-0,49%) despidieron la sesión con pérdidas.

Por otra parte, la inflación de Estados Unidos, aunque se mantuvo en agosto por encima del 5% por tercer mes consecutivo, no añadió más presión al bajar en tasa interanual una décima, hasta el 5,3%. El IPC subyacente cayó hasta el 4%, frente al 4,3% anterior. Este dato, añadido a la pobre creación de empleo en agosto, aleja la posibilidad de que la Fed decida acelerar la retirada de los estímulos en la reunión de la próxima semana. A la hora del cierre en Europa, Wall Street se movía en rojo, tras una apertura alcista. Solo el Nasdaq 100 se anotaba una leve subida.