GARA
LA HAYA

Madres solteras de Países Bajos fueron forzadas a abandonar a sus hijos

Entre 1956 y 1984, al menos 13.000 madres solteras en Países Bajos entregaron a sus hijos en adopción, y muchas, como la ya septuagenaria Trudy Scheele-Gertsen, lo hicieron forzadas por la familia y los servicios sociales. Llevan décadas exigiendo justicia y el Estado neerlandés acaba de ser responsabilizado por ello ante los tribunales.

Scheele-Gertsen tenía apenas 21 años cuando se quedó embarazada, estaba completando sus estudios de enfermería y, aunque no contaba con tener un bebé en ese momento, sí había decidido y mostrado su intención de quedarse con su hijo, nacido en 1968.

Presionada

Sin embargo, se vio presionada por sus padres, que no aceptaron que diera a luz en casa como madre soltera; por los servicios de protección infantil, que le ocultaron información que pudiera ayudarla a sobrellevar la maternidad; y por las religiosas del centro para madres solteras donde dio a luz, que la separaron de su bebé porque era hijo del «pecado».

La denunciante, de 75 años, decidió demandar ahora al Estado y declarar una guerra por la que miles de mujeres como ella han aguardado desde la década de los 50. «Muchas creían que solo había una opción si se quedaban embarazadas, cuando en realidad había suficientes vías para criar al bebé sola, pero raramente te las decían», aseguró Scheele-Gertsen.

En el juicio en marcha, el Estado alega la prescripción del caso y asegura que no hay evidencias de que se hubieran cometido actos ilegales. Los servicios de protección de menores actuaron «de buena fe» y el Gobierno «entiende el sufrimiento» de estas mujeres.