GARA
LONDRES

Un diputado británico muere apuñalado en un encuentro con sus electores

El diputado conservador David Amess murió apuñalado ayer cuando mantenía un encuentro con electores de su circunscripción en el condado inglés de Essex. El ataque recordó sucesos similares y abrió el debate sobre la seguridad de este tipo de reuniones.

El diputado conservador David Amess, de 69 años, murió apuñalado ayer en una iglesia de Essex mientras mantenía un encuentro con sus votantes de su circunscripción en Leigh-On-Sea, en ese condado de Inglaterra.

El ataque sucedió en una iglesia metodista, cuando un hombre armado con un cuchillo irrumpió en el encuentro que mantenía Amess con sus votantes. El diputado, parlamentario desde 1983, fue atendido por los servicios de emergencia en el lugar de los hechos, pero falleció poco después. 

La Policía británica detuvo a un hombre de 25 años como principal sospechoso de haber apuñalado a Amess y encargó la investigación a especialistas de la unidad «antiterrorista», aunque subrayó que todavía no se conocían las motivaciones del presunto autor del apuñalamiento y que mantenían abiertas todas las opciones.

Este tipo de reuniones con los votantes son relativamente frecuentes entre los legisladores británicos. En junio de 2016, la diputada laborista Jo Cox murió antes de participar en un foro similar, tiroteada por Thomas Mair, un ultraderechista con problemas mentales. Mair fue condenado a cadena perpetua a finales de ese mismo año.

«Mi corazón está lleno de consternación y de tristeza», declaró el primer ministro, Boris Johnson, antes de describir al fallecido diputado como una de las personas más «amables y bondadosas» de la política británica. «Era un hombre que creía apasionadamente en este país y en su futuro. Hemos perdido a un espléndido servidor público, y a un amigo y colega muy querido», señaló. Fue una de las numerosas muestras de condolencias de los políticos británicos.

El presidente de la Cámara, Lindsay Hoyle, se declaró «consternado y profundamente afectado» por la muerte de un «hombre encantador, devoto de su familia, de la actividad parlamentaria y de su electorado» en Southend West, y pidió que «en los próximos días se discuta la situación de seguridad de los diputados, así como las medidas a tomar» al respecto.

El propio Amess había pedido en marzo a Johnson que garantizara que se redujeran los delitos con arma blanca tras la muerte de un joven apuñalado en su circunscripción.

Además de la muerte de Cox, el diputado laborista Stephen Timms fue apuñalado en 2010, pero pudo sobrevivir a las heridas. En enero de 2000, el parlamentario liberal-demócrata Nigel Jones resultó herido y su asistente murió, atacados por un hombre con un sable en un encuentro con electores en Cheltenham.

El exlíder conservador Ian Duncan Smith mostró su preocupación por la seguridad de estas reuniones. «Cuando no estás en tu oficina y estás en un lugar público no se pueden adoptar las medidas de seguridad que se recomiendan», indicó.