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Las acusaciones contra Bolsonaro por su gestión de la pandemia llegan a la Fiscalía General

La Fiscalía General de Brasil tiene ya sobre su mesa el informe sobre la gestión de la pandemia en el que una comisión de investigación del Senado acusa de crímenes contra la humanidad, además de otros ocho delitos, al presidente de Brasil, Jair Bolsonaro.

De «payasada» calificó ayer el ultraderechista Jair Bolsonaro, el informe de la comisión del Senado que le acusa de crímenes contra la humanidad y otros ocho delitos por su gestión frente a la pandemia, aunque admitió que un informe de esa naturaleza «causa muchos problemas» porque de cara al exterior «la imagen es pésima» y afecta hasta a la economía del país.

El documento, aprobado este martes por siete votos contra cuatro, fue recibido por el fiscal general, Augusto Aras, que se comprometió a estudiar las acusaciones contra Bolsonaro, cuatro ministros y una decena de legisladores, que por su condición de aforados solo pueden ser investigados por ese organismo, y tres de sus hijos.

El informe será entregado también a otras instancias para que investiguen a los no aforados y en el caso de Bolsonaro será remitido incluso a la Corte Penal Internacional de La Haya.

La comisión dice haber recabado graves indicios sobre la responsabilidad del Gobierno en el agravamiento de la pandemia de covid-19, que ya ha matado en el país a más de 606.000 personas.

En el caso del líder ultraderechista son nueve acusaciones: crímenes contra la humanidad, infracción de medidas sanitarias, charlatanería médica, incitación al delito, falsificación de documentos, uso irregular de dinero público, prevaricación, epidemia con resultado de muerte y atentado contra la dignidad del cargo.

«El fiscal general debe ser defensor de los derechos del pueblo y no del Gobierno de turno. Estaremos vigilantes», declaró el senador Randolfe Rodrigues, vicepresidente de la comisión.

Aludió así a las dudas que existen en la oposición en relación a Aras, un fiscal alineado con el Gobierno y que durante los dos últimos años ha archivado unas 90 denuncias contra Bolsonaro.