El invierno ha sido largo y duro. Llevamos trabajando muy duro desde noviembre y lo cierto es que tenemos muchas ganas de saltar al agua y competir». Son palabras de la patrona de Orio Nadeth Agirre, pero cualquier miembro del mundo del remo las suScribe letra por letra. Por fin ha llegado el fin de semana en el que las ligas Eusko Label y Euskotren se ponen en marcha y de poner a prueba el trabajo realizado lejos de los focos y las cámaras. Es hora del mejor remo.

El aperitivo de la Liga ETE y las divisiones primera y segundas de la ARC están muy bien, pero todo el mundo está a la espera a que el reloj marque las 17.40 de hoy, primer fin de semana de julio, y se ponga en marcha la Liga Euskotren 2022, con la disputa de la IV Bandera de Bilbo, mientras que hacia las 18.13 -así marca en la propia web de la competición- arrancará la primera tanda de XIII Bandera de Bilbo de la Liga Eusko Label.

«Hemos trabajado un montón en pretemporada y el bote en apariencia va bien. Pero cuando de veras se vea si va bien o no será cuando tengamos a los rivales a nuestro lado y veamos si los dejamos atrás o son ellos quienes nos descuelgan, indica a GARA, por su parte, Eneko Bilbao, uno de los patrones de Urdaibai que, junto con Gorka Aranberri, confiere a la «Bou Bizkaia» de Bermeo la etiqueta de favorito en la Liga Eusko Label, pistoletazo de salida de dos meses y medio muy intensos hasta terminar el 18 de setiembre con la célebre Bandera del Corte Inglés de Portugalete que, junto con los play-offs de ascenso, darán por finalizada la temporada.

UN NUEVO CAMPEÓN

Una de las verdades absolutas que parece tener cabida en la previa a que arranque la temporada 2022 del remo es que Santurtzi no repetirá como campeón de la Liga Eusko Label. Los problemas económicos han traído que la “Itsasoko Ama” tenga así una directiva nueva y una tripulación remozada de punta a cabo -13 bajas y 14 altas-, mientras que Zierbena y Urdaibai son dos de las traineras que, a cuenta de ese descalabro santurtziarra, mejor se han reforzado.

«Este año la película va a ser otra. Nueva directiva, nuevo entrenador... todo nuevo. El año pasado ganamos y por eso el sábado en la contrarreloj de Bilbo saldremos los últimos, pero nuestros rivales ya no serán esos de la última tanda», admite el remero Hegoi Intxauspe. «Vamos a intentar librarnos de esa última plaza cuanto antes, y de la penúltima también si es posible, porque cualquier resultado va a estar muy reñido», añade.

Es curioso que un vigente campeón y un recién llegado como Getaria, que debuta en la Liga Eusko Label, vayan a compartir objetivos, pero así son las cosas.

«En su día, en 2014, también acabamos segundos el play-off de ascenso, pero por aquella política de cuotas que benefició a Astillero, no pudimos ascender a lo más alto. Haberlo logrado ahora en 2022 nos ha dado mucha calma y un punto de paz», admite el remero de Getaria y periodista Jon Ander De la Hoz. «Pero ese punto de paz no quita que la exigencia ahora es todavía mayor, si cabe. Al final, nosotros conocíamos a qué nivel podíamos rendir en la Liga ARC1, pero esto es ya la élite, y aunque las sensaciones en el agua son buenas y el trabajo que venimos haciendo ha estado muy bien, hasta que no nos pongamos a competir, nadie sabe a qué atenerse», advierte.

«Yo creo que la temporada estará dividida en dos bloques de seis botes», añade Eneko Bilbao. «Junto con Bermeo, nosotros, estarán Orio, Zierbena, Hondarribia, Donostiarra... e igual alguno más, y luego por debajo están, tal vez, los que recién hayan ascendido y otros botes entre los que habrá mucha igualdad, en el que, quien se descuide, pasará de remar en la segunda tanda un día a que al día siguiente se vea entre los más flojos».

COMENZAR BIEN, ESENCIAL

La regata de Bilbo seguirá con XIV Bandera Fabrika de Donostia, en la bahía de La Concha, el domingo día 3, la primera regata en mar abierto, antes de afrontar el fin de semana del 9 y 10 de este mes la VI. Bandeira Cidade da Coruña, la primera de las salidas a las siempre temidas aguas de Galicia -a veces temidas hasta la exageración-, un arranque «para todos los gustos» que el año pasado supuso para Santurtzi una ventaja que más tarde supo gestionar para lograr su segundo entorchado liguero.

«Hay que llenar el saco de puntos cuanto antes», advierte Jon Ander De la Hoz. «Nuestro objetivo, como el que puede tener Kaiku -el otro recién ascendido de la ARC1, de la mano del incombustible José Luis Korta- y otros, es escapar del descenso directo de la última plaza, y con suerte de la undécima también, y ahí cada punto que sumemos, importa, porque no podemos estar guardándonos nada para agosto o setiembre. Si empiezas mal te comes más la cabeza, sobre todo en un grupo tan joven como este, y por si llegan momentos de bajón físico o lesiones, que no los puedes prever, tienes que ir sumando», subraya.

Si empezar bien para no bajar puede resultar esencial, los que vayan a bogar para estar en la parte alta de la tabla tienen las mismas ideas y los mismos dolores de cabeza. «Hay muchos factores que suman», resume Eneko Bilbao. «El trabajo desde noviembre se hace duro y es bueno refrendarlo desde el principio, sobre todo sabiendo que las cosas irán muy justas», incide, a sabiendas de que siendo parte del bote favorito, su responsabilidad en el buen gobierno de la trainera «es todavía mayor de lo grande que ya es».

«El grupo está muy fuerte y se siente muy bien. Y sobre todo, ganar el Campeonato de Gipuzkoa fue un test que nos sirvió de mucho», añade por su parte el remero de Hondarribia Iñigo Sagarzazu. «No hemos hecho muchos cambios, más allá de subir a tres chavales de la cantera, con lo que ello supone de facilidad de adaptación, porque nuestra remada es igual en todas las categorías. Todo eso nos viene bien, porque preveo que todo estará tan justo entre cuatro o cinco botes; tanto es así que quien cometa algún error lo va a pagar caro», subraya.

«Lo que importa antes de empezar a remar en competición, es coger la remada durante la preparación», remata el preparador de Zierbena, Jon Elortegi. «Nosotros tenemos una cuadrilla muy buena y equilibrada, sin excusas, pero sin mirar más adelante, lo que toca es que en la primera regata en Bilbo seamos capaces de coger nuestra remada. El primer paso para comenzar bien y sumar, estará ahí», remacha el entrenador de los “galipos”.

CUATRO BOTES EN DIEZ SEGUNDOS

No conviene olvidarse de la Liga Euskotren, que arranca su último año con cuatro embarcaciones, antes de que el 2023 se sumen cuatro más al elenco. «Ya hablaremos de esos cambios el año que viene; primero hay que estar centradas en los cuatro equipos de este verano», conmina la patrona de Orio Nadeth Agirre, sabedora de lo que es ganarlo todo, y del esfuerzo que supone lograr tal éxito.

Y es que Arraun Lagunak arrebató el cetro del remo femenino el año pasado a las “aguiluchas”, con una bandera de diferencia para las de Donostia, ya que hubo una igualdad absoluta de puntos entre las dos primeras. Además, este año Orio presenta hasta nueve cambios en su tripulación amén de tener un entrenador nuevo: Patxi Francés.

«Aquello ya pasó y aunque la Liga Euskotren 2021 fue para Arraun Lagunak, a quien hay que felicitar, creo que nosotras también hicimos una gran temporada», incide Agirre, quien ya vislumbra lo que viene por delante. «El invierno ha sido largo con los cambios entre las remeras y el entrenador, teniendo que hacernos a nuestra nueva remada, pero estamos bien. Lo que pasa es que en pretemporada la gente siempre se guarda alguna carta y hasta que empieza la competición más importante nadie las pone sobre la mesa», añade.

«Lo más normal es apostar por un nuevo mano a mano entre Orio y Arraun Lagunak, pero yo confío en mis remeras; ya se vio en el Campeonato de Gipuzkoa, que a la que falló una ahí nos metimos nosotras, haciendo un gran largo de vuelta». Son palabras de Ramón Erostarbe, entrenador del equipo de Tolosaldea, principal novedad de la Liga Euskotren, luego de rozar el ascenso varias veces.

Erostarbe pide algo de paciencia, ya que indica que «hasta que no pasen las dos o tres primeras regatas, no sabremos del todo dónde está cada cual». Acostumbrada a dar datos concretos, Nadeth Agirre apunta que «podemos encontrarnos a los cuatro botes de la competición en 10 segundos. Eso significa que quien gana una bandera hoy, al día siguiente puede acabar tercero si comete algún fallo, por lo que, aunque puede haber dos favoritas, las otras dos traineras no andarán lejos».

El primer objetivo de Tolosaldea es librarse de la última plaza, pese a reconocer que tanto Arraun Lagunak como Donostiarra se han reforzado, a sabiendas de que Orio volverá a la carga. «Lo del año pasado fue increíble, pero esta temporada es nueva del todo, y la vemos como una nueva oportunidad», opina la remera de Arraun Lagunak Lorea Etxabe.

Las campeonas del año pasado han reforzado su bote, con llegadas como la de Ane Pescador, entre otras, con tal de repetir el éxito del pasado año. «En los entrenamientos diría que se ve esa mejoría», opina Etxabe, pero se apunta al sonsonete de todos los botes.

«Los entrenamientos están bien, pero la verdad saldrá a la luz a partir del sábado», en una competición que vivirá su punto final en la tradicional Ikurrina de Zarautz, los días 20 y 21 de agosto, lo cual supone exprimir las capacidades de las remeras en un período todavía más breve y estresante porque el margen de error es todavía más pequeño que en categoría masculina.

Se acabó el largo y desapacible invierno, y ahora arranca el verano de las traineras, corto, intenso, cargado de tensión y de esperanza. Porque, como bien escribió el gran Manuel Vázquez-Montalbán, «Siempre se espera un verano mejor y propicio, para hacer lo que nunca se hizo».

Declaraciones

«El invierno ha sido largo y duro, y más con los cambios que hemos hecho. Llevamos trabajando muy duro desde noviembre y lo cierto es que tenemos muchas ganas de saltar al agua de una vez y ponernos a competir»

NADETH AGIRRE

Patrona de la trainera femenina de Orio