Iñaki IRIONDO
GASTEIZ
EJECUCIÓN DE LOS PRESUPUESTOS DE LAKUA DE 2021

Lakua se niega a explicar su baja ejecución de las «inversiones reales»

No es solo que el Gobierno de Lakua dejara sin ejecutar el 41,31% de su presupuesto para «inversiones reales» de 2021 y que el cumplimiento durante 2022 esté siendo mínimo, es que además el consejero de Economía, Pedro Azpiazu, niega al Parlamento explicaciones sobre esta actuación pese a haber sido cuestionado directamente.

El consejero de Economía y Hacienda, Pedro Azpiazu, a la entrada del Parlamento antes de un pleno.
El consejero de Economía y Hacienda, Pedro Azpiazu, a la entrada del Parlamento antes de un pleno. (Raúl BOGAJO FOKU)

Prácticamente como cada año, a finales de 2020 el Gobierno de Lakua anunció que su proyecto de Presupuesto para 2021 tendría unas partidas para inversiones superior a cualquier anterior, porque como dijo el consejero de Economía y Hacienda, Pedro Azpiazu, eran unas cuentas públicas con «una mirada valiente a nuestro futuro, el camino para la reconstrucción social y la reactivación económica y del empleo en Euskadi. Lo afrontamos con fuerza y confianza».

Pero un cosa son los presupuestos y otra su ejecución. Y así, con respecto a las «inversiones reales» previstas para 2021, lo que se observa es que se han materializado poco más de la mitad de las anunciadas oficialmente.

Según los últimos números remitidos por el Gobierno al Parlamento, el presupuesto actualizado de 2021 para el capitulo 6 de «inversiones reales» fue de 334,5 millones de euros, pero de ellos solo se han utilizado 196,3 millones de euros, quedándose sin gastar 138,2 millones.

Esto supone que la ejecución de este capítulo, presentado como uno de los pilares del presupuesto de Lakua, fue de algo más de la mitad, en concreto un 58,68%. Es decir, se quedaron guardados en la cartera del Gobierno el 41,31% de los millones prometidos.

Cifras que no concuerdan.

Cuando el 31 de marzo los responsables del Departamento de Economía y Hacienda, con el consejero Pedro Azpiazu al frente, presentaron la ejecución consolidada provisional del Presupuesto de 2021, aseguraron que «respecto a los capítulos ‘inversores’ (capítulos 6, 7 y 8) la ejecución media de los tres es del 83%». De 1.300 millones de euros, se han ejecutado 1.077 millones.

Esas cifras no concuerdan con los últimos datos remitidos al Parlamento. Según ellos, el presupuesto actualizado de esos capítulos fue de 1.592,6 millones de euros, de los que se ejecutó un 71,45%, no el 83% del que habló el Gobierno. Se quedaron sin gastar 454,7 millones de euros, es decir, el 28,55% restante.

Pregunta sin respuesta.

El parlamentario del PP Luis Ignacio Gordillo preguntó al consejero Pedro Azpiazu sobre esta baja ejecución del presupuesto de «inversiones reales», que no llegó al 58,7%. Y le recordó que en 2020, el año más duro de la pandemia, la ejecución de este capítulo de las cuentas públicas fue del 62,0%.

En su pregunta, Luis Ignacio Gordillo puso otro dato sobre la mesa que demuestra que en 2022 la situación es todavía peor. En el primer trimestre de 2021 se había ejecutado el 3,1% del presupuesto, y este año apenas ha sido el 1,1%. Quería saber cómo lo valoraba el consejero y si veía necesario tomar medidas.

El parlamentario del PP añadió un cuadro estadístico que muestra que en 2014, en estas fechas la ejecución del presupuesto en inversiones fue algo superior al 10%. En un año cayó al 4%. En 2017 se acercó al 6% y desde entonces está muy por debajo.

Pero la respuesta de Pedro Azpiazu no ofrece ninguna opinión del Departamento. Se limita a decir que el 28 de junio ya remitió al Parlamento el Informe de Situación Presupuestaria por Partidas del conjunto del ejercicio de 2021, que dio acuse de recibo el 5 de julio. Se trata de un documento técnico de exactamente 1.309 páginas, donde se recogen, entre otros, los números por los que el parlamentario del PP ya había preguntado al consejero. No contiene ni valoraciones ni comentarios.

El Gobierno de Lakua parece no tener interés en ofrecer al Parlamento explicaciones sobre por qué no está cumpliendo aquellos presupuestos que aprobó solemnemente.