Raimundo FiTERO
DE REOJO

Entre calentones y reventones

Aprendemos conceptos, ideas y modelos de comportamiento de los elementos naturales producidos debido a diferentes efectos, a base de sucesos. La que se nos incrustó en la conversación post siesta como gota fría, ahora mismo tiene diferentes acepciones dependiendo de cómo esté el anticiclón, la borrasca y otros componentes de la meteorología aplicada y difundida por jóvenes profesionales de los medios de comunicación que nos hablan del tiempo a partir de los datos que una empresa estatal suministra con profusión y acierto científico, más los conocimientos de esas (la mayoría son mujeres) transmisoras perfectamente formadas que los convierten en algo entendible. O así parece.

En la costa mediterránea ha ocurrido una tragedia en un festival de música, unas rachas de viento han desmontado escenarios, portadas, es decir estructuras montadas con urgencia, provocando un muerto y varios heridos, alguno de carácter grave. Todo se explica, al parecer, por lo que se llama reventón térmico, un fenómeno que hace que se caliente el ambiente en minutos y por una serie de circunstancias se provoquen rachas de viento huracanado capaces, en este caso, de tirar las estructuras provisionales. ¿Es el calentón el único responsable o hay que indagar?

El viento huracanado, la galerna, todo cuanto nos acompaña en estos momentos del verano, nos deja una noticia de alcance: la muerte de un señora en una playa de EEUU por una sombrilla arrebatada de su enclave por causa del viento y lanzada a decenas de metros. No hay pie de foto.