Si nos atenemos a lo acontecido en el universo virtual, todo el mundo coincidirá en que este ha sido el año de NSA. Por un lado, hemos sido testigos directos de una realidad que debía ser constatada -Internet no es un espacio libre- y, por otro, que ni siquiera las grandes potencias gubernamentales, como ha sido el caso de la Agencia de Seguridad Nacional estadounidense, pasan inadvertidos en un entorno que, por fortuna, cuenta con múltiples bosques de Sherwood virtuales.

Tras los episodios perpetrados por la NSA, las compañías con más peso en el panorama tecnológico se han puesto de acuerdo para una misma causa: pedir una reforma de esta agencia para que modifique su conducta lo antes posible. Todo ello ha quedado constatado en una carta dirigida al presidente Obama y al Congreso estadounidense firmada por Google, Apple, Microsoft, Facebook, Twitter, Yahoo, LinkedIn y AOL.

La seguridad es un tema que figura entre las principales preocupaciones de los usuarios y por ese motivo, las principales compañías relacionadas con la tecnología pretenden evitar nuevos episodios que podrían provocar que tanto las empresas como los propios usuarios se declinen por otros sistemas operativos, dispositivos.

Hace varios días, Microsoft declaró que para 2014 mejorará el cifrado de la mayoría de sus servicios y para que quedara constancia de ello redactó una declaración de intenciones que apoyada por otos emporios tecnológicos y que puede ser leída en la página web Reform Government Surveillance (reformar la vigilancia del Gobierno). A través de este comunicado conjunto, los pesos pesados del sector tecnológico piden al Gobierno del presidente Barack Obama que modifique los programas de vigilancia y ofrezca más transparencia sobre los mismos.

Todo ello ha quedado resumido en cinco puntos: limitar la autoridad del Gobierno para obtener información de los usuarios; supervisión y rendición de cuentas; transparencia sobre las demandas del Gobierno; Respetar el libre flujo de la información y evitar conflictos entre gobiernos.