GARA JOHANNESBURGO
MUERTE DE NELSON MANDELA

El homenaje a «Madiba» alumbra gestos históricos de distensión

Las gradas del simbólico estadio Soccer City de Johannesburgo acogieron a decenas de miles de personas para homenajear al recientemente fallecido líder africano Nelson Mandela. El homenaje a su legado incluyó un histórico apretón de manos entre los presidentes de EEUU, Barack Obama, y de Cuba, Raúl Castro.

El estadio Soccer City de Johannesburgo, donde el expresidente sudafricano Nelson Mandela hizo su última gran aparición pública el 11 de julio de 2010 con motivo de la final del Mundial de Fútbol, se convirtió ayer en «una manifestación de unidad universal», tal y como subrayó el general, portavoz de la familia y sobrino del fallecido Thanduxolo Mandela.

En sus gradas se dieron cita durante más de cuatro horas «fuertes y débiles, ricos y pobres, poderosos y gente anónima con un único objetivo; honrar al héroe de la lucha contra el apartheid y primer presidente negro de Sudáfrica».

«Estoy seguro de que Mandela debe sonreír allá arriba. Siempre hemos sabido que compartíamos a Madiba con Sudáfrica, África y el resto del mundo», subrayó. La sensación de estar ante un momento único, como el entierro de Mahatma Gandhi, atrajo a gente de a pie, a miles de periodistas y a celebridades como Bill Gates, Charlize Theron, Oprah Winfrey, Bono y Naomi Campbell.

La ceremonia interreligiosa y multicolor que reunió a casi un centenar de jefes de Estado y de Gobierno estuvo plagada de momentos emotivos como el abrazo entre la viuda de Mandela Graça Machel, y su exesposa Winnie Mandela, y de gestos históricos como el protagonizado por el presidente de Estados Unidos, Barack Obama, y su homólogo cubano, Raúl Castro, que por primera vez estrecharon sus manos e intercambiaron unas palabras, acaparando la atención mundial al tratarse del primer saludo entre mandatarios de ambos países desde el triunfo de la Revolución cubana.

Los términos «paz, reconciliación, altruista, sacrificio, comprensión y amor» se repitieron en cada intervención. «Es difícil elogiar a cualquier hombre, mucho más a un gigante de la historia, que condujo a su nación hacia la justicia», exclamó Obama, uno de los primeros mandatarios en llegar a la capital sudafricana junto a su esposa Michelle y aplaudido a su entrada al estadio. El mandatario de Zimbabwe, Robert Mugabe, el expresidente sudafricano Thabo Mbeki y el vicepresidente Kgalema Motlanthe también fueron aclamados en contraste con los abucheos que recibió desde las gradas el presidente Jacob Zuma cada vez que su rostro aparecía en las pantallas del estadio. Cyril Rampahosa, vicepresidente del Congreso Nacional Africano que ejerció de presentador, pidió calma y «disciplina» a los asistentes a este multitudinario homenaje, deslucido en parte por la intensa lluvia y los problemas de megafonía.

Por su parte, el secretario general de la ONU, Ban Ki-Moon, destacó la capacidad de Mandela de seguir acercando, de manera póstuma, a personalidades y países adversos entre sí. «Demostró la poderosa fuerza del perdón y su capacidad de unir a la gente y hoy -por ayer- lo ha hecho de nuevo», manifestó.

En Robben Island

Simultáneamente, en la isla-prisión de Robben Island, donde Mandela pasó 18 años preso y reconvertida en museo, cerca de 200 personas le rindieron un pequeño homenaje.

«Cuando salió libre, se llevó de la cárcel su experiencia de convivir con diferentes razas, culturas y tendencias políticas, para pedir la reconciliación», remarcó en la ceremonia Lionel Davis, exprisionero.

El excarcelero Christo Brand, que conoció a un sexagenario Mandela con 18 años y acabó forjando una estrecha amistad con él pese al «odio» inicial que sentía hacia quien en aquel entonces era calificado como «el mayor criminal de Sudáfrica», lo recordó como una persona que lo daba todo por los demás. Destacó que se mantuvo igual durante su época de presidente que cuando estaba preso. Aunque expresó su tristeza por su muerte, afirmó sentirse bien porque «sé que murió en paz y era eso por lo que peleaba».

Desde el lunes, una vela ilumina la celda de 2,5 por 2,1 metros en la que estuvo como «símbolo el triunfo del espíritu humano», señaló director del museo, Sibongiseni Mkhize.

Sortu ere omenaldian izan zen, ANC taldeak gonbidatuta

ANC talde politikoak gonbidatuta, Urko Aiartza Nelson Mandelari atzo eginiko omenaldian izan zen Sorturen ordezkari gisa. Bere hitzetan, «Mandela iraultzaile guztientzako etsenplua da eta bere legatuak mundu justuago baten aldeko borrokan ari diren herri eta pertsona guztientzako inspirazio iturri behar luke izan».

«ANC mugimenduak eta Nelson Mandelak berak Euskal Herrian bake iraunkorra lortzeko ahaleginak betidanik sostengatu dituzte, eta gaur, Madibaren aldeko omenaldian izanik gure herriaren esker ona agertu nahi diogu», nabarmendu zuen Aiartzak. Ezker abertzaleak ANCrekin duen aspaldiko harremana gogora ekarri zuen, baita 2010ean Mandela Fundazioak Bruselako Adierazpena babestu zuela ere.

Udalbiltzak ere goraipatu zuen «herritarren giza eskubideen nazioarteko ikurra». «Zapalduta zeuden herritar beltzen eskubideen alde aritu zen, eta azkenean, Hegoafrikak eta mundu osoak aitortu dute haren lana». «Bere bidea erreferentzi garrantzitsu bat dugu. Gure Herriaren eskubideen alde», plazaratu zuen. GARA